Cumpleaños en «privado»

Don Juan Carlos, que celebró ayer su 79 aniversario, tampoco irá este año al Palacio Real

Cómo, dónde, cuándo y con quién el Rey Juan Carlos ha celebrado su 79 cumpleaños es una auténtica incógnita. Habrá que esperar uno o dos días para saber si el Monarca emérito ha optado por soplar las velas de este nuevo aniversario en California, tal como hizo los dos años anteriores, o ha preferido en esta ocasión permanecer cerca de Madrid y celebrar su cumpleaños en alguna localidad española, acompañado de alguno de sus hijos. En el palacio de la Zarzuela se han mantenido un año más fieles al «no sabe, no contesta» al ser preguntados de qué manera el Rey emérito iba a festejar el año más que le ha caído encima. La razón para mantener esa postura hay que buscarla en el deseo de preservar la intimidad del Rey en un asunto que se considera «privado», además de que ni siquiera ellos saben cómo y de qué forma el anterior Jefe del Estado va a celebrar el 79 aniversario de su nacimiento.

Por otra parte, hay que tener en cuenta que nunca ha habido grandes celebraciones para conmemorar los cumpleaños dentro de la Familia Real española. Ni siquiera cuando Don Juan Carlos ejercía como Monarca se organizó fiesta alguna con invitados de otras casas reales extranjeras, al igual que habitualmente sucede en las cortes europeas que programan cruceros, ceremonias religiosas y bailes fastuosos . Tampoco tuvo éxito el intento de institucionalizar un concierto en el Teatro Real a cargo de Plácido Domingo y José Carreras la tarde de cada 5 de enero, que terminaba con la voz de los dos cantantes de ópera entonando el «cumpleaños feliz».

Lo que sí se hizo en un par de ocasiones fue aprovechar esa fecha tan señalada en la vida del anterior Jefe del Estado para hacer una visita a las tropas españolas en lugares de conflicto para ayudar al mantenimiento de la paz. Así fue hace 19 años, cuando Don Juan Carlos se desplazó a la localidad croata de Mostar, donde un destacamento de las Fuerzas Armadas españolas permaneció varios años después del final de la guerra de los Balcanes. Su misión era contribuir a la reconstrucción de la zona y, lo más importante, ayudar a la reconciliación de sus ciudadanos, pertenecientes a bandos enfrentados con dureza durante la guerra. Apoyar a los soldados españoles y expresarles su pleno apoyo fue lo que movió al Monarca a desplazarse a esa zona de conflicto en una fecha tan señalada, en vez de asistir a un evento de carácter puramente social.

La única excepción a la norma de austeridad y falta de pompa y boato en los cumpleaños reales fue hace nueve años, cuando Don Juan Carlos celebró su 70 aniversario. Las máximas autoridades del Estado y la Familia Real se pusieron de acuerdo para rendir homenaje al Monarca durante una cena en el Palacio del Pardo a la que asistieron 450 invitados cuando ya se habían cumplido 32 al frente de la institución. La celebración llegó a su punto álgido cuando el entonces Príncipe de Asturias pronunció unas sentidas palabras de admiración, respeto y cariño a su padre, en nombre de toda su familia. Felicitó a su padre, al que llamó «querido Patrón», por ser un ejemplo permanente de una intensa vida entregada al servicio de la nación española. Y para finalizar, Don Juan Carlos volvió a reiterar su compromiso de futuro con todos los ciudadanos y se mostró orgulloso por todo lo conseguido junto con todos ellos.