Tecnología para el consumo y gestión del agua

La creciente preocupación por la sostenibilidad hídrica ha impulsado la adopción de soluciones tecnológicas, que pueden marcar un antes y un después en la manera en que gestionamos y utilizamos este recurso vital. Desde la prevención de inundaciones devastadoras hasta la optimización del riego en la agricultura, la tecnología puede ser el aliado indispensable en la lucha por un futuro hídrico más seguro y eficiente, tanto en España como en el escenario mundial.

Un ejemplo palpable de esta transformación se vive en Zaragoza, ciudad que sufrió las graves consecuencias de inundaciones sin precedentes en 2023. Ante esta situación crítica, el ayuntamiento ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de gestión de inundaciones en colaboración con Amazon Web Services (AWS). «Al aprovechar el poder de los datos en tiempo real y el análisis a través de la inteligencia artificial, no solo estamos mitigando los riesgos de inundación, sino que estamos transformando Zaragoza en una ciudad más resiliente y estableciendo un ejemplo de ciudad inteligente frente a eventos climáticos extremos», ha comentado Natalia Chueca, alcaldesa de Zaragoza. Este sistema inteligente de alerta temprana, basado en la nube de AWS, combina la recopilación de datos en tiempo real con redes avanzadas de sensores, el internet de las cosas (IoT), y análisis impulsados por inteligencia artificial (IA).

La agricultura, sector que consume más del 90% del agua total en la cuenca del Ebro, también está experimentando una revolución gracias a la tecnología. La empresa zaragozana Libellium ha desarrollado soluciones de riego inteligente que, mediante la monitorización de la humedad de la tierra, optimizan el uso del agua en parques y jardines, alcanzando reducciones de entre un 20 y un 40%. Para Alicia Asin, CEO de Libellium, lo importante es ofrecer soluciones que respondan a las necesidades reales de los usuarios.

Alicia Asin también subraya la importancia de los datos de calidad y su transformación en información comprensible para la toma de decisiones. «Por un lado, los datos tienen que ser datos de calidad, precisos, fiables. Cuanto mayor calidad tengamos aquí, mejores conclusiones podremos sacar», afirma Asin. Libellium ha desarrollado, por ejemplo, gemelos digitales de la contaminación en las ciudades, capaces de visualizar la calidad del aire de una manera intuitiva y permitir simulaciones de diferentes escenarios para la toma de decisiones informadas. «Con un gemelo digital, somos capaces de traducir en un mapa de calor los niveles de calidad de aire y aplicar diferentes simulaciones», detalla. Esta capacidad de hacer visible información compleja es crucial para concienciar a la ciudadanía y a los gobernantes sobre los problemas ambientales y las posibles soluciones.

Grandes cantidades

La gestión de inundaciones fluviales y urbanas también se beneficia de sistemas de alerta temprana (SAT). Estos sistemas integran diversas tecnologías y sensores para una supervisión y reacción en tiempo real, utilizando modelos de predicción meteorológica avanzados y modelos hidrológicos e hidráulicos para la evaluación del riesgo.

La Confederación Hidrográfica del Ebro y Aguas de Calpe son ejemplos de administraciones que han implementado esta solución para anticipar eventos de inundación, activar alertas automáticas y coordinar planes de emergencia de manera eficiente. Estos sistemas no solo predicen inundaciones, sino que también pueden generar mapas de inundaciones, recomendar acciones específicas para infraestructuras clave y difundir alertas personalizadas a las administraciones correspondientes.

También en la vida marina la tecnología tiene mucho que decir. Así, por ejemplo, el IFREMER (Instituto Francés de Investigación para la Explotación del Mar) maneja ingentes cantidades de datos marinos para la conservación de los mares. Benoît Morin, jefe de proyecto DATARMOR y líder en IA y HPC de IFREMER, explicaba que utiliza la inteligencia artificial para modelar patrones climáticos extremos y su impacto en la vida marina y el entorno costero. «Estamos tratando de desarrollar sistemas utilizando IA para modelar esos patrones climáticos extremos», explicó Morin. Además, IFREMER participa en el programa Copernicus de la Unión Europea, que proporciona datos y servicios de observación de la Tierra de forma gratuita y abierta, incluyendo información crucial sobre los océanos.

Colaboración público privada

La colaboración entre instituciones públicas, empresas tecnológicas y centros de investigación se revela como un factor clave para el éxito de estas iniciativas. La modernización de infraestructuras, la implementación de sistemas inteligentes y el análisis avanzado de datos están transformando la gestión del agua, abriendo un camino hacia un futuro más sostenible y resiliente ante los desafíos hídricos que plantea el siglo XXI.