Transportes

El otro caos de Óscar Puente: España, a la cabeza de accidentes en autopista

El 8,2% de la red viaria tiene alta siniestralidad. Las peores, las autovías del Cantábrico y del Mediterráneo

Accidente de tráfico en Palencia
Lugar del accidente de tráfico donde ha fallecido un varón de 20 años y otras dos personas han resultado heridas por el choque de dos turismos en el kilómetro 2 de la A-67 en Villamuriel de Cerrato (Palencia)BrágimoIcal

Los problemas se le acumulan al ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente. En el centro de la diana por el enquistado caos ferroviario, los números en la gestión de las carreteras le presentan un reto similar, con España situada en los primeros puestos de siniestralidad en autopistas y en segundo lugar de toda la Unión Europea por lo que respecta a víctimas mortales en estas vías rápidas.

Mientras que en la mayoría de países de la Unión Europea el 50% de los accidentes graves se concentra en las carreteras rurales, solo siete países registraron porcentajes superiores al 10% de víctimas mortales en autopistas, con Eslovenia al frente –con un 29,4% del total de víctimas mortales– seguida de España, con un 20,6%, más del doble que Francia e Italia y casi el doble que Alemania, según los datos de Eurostat correspondientes a 2022.

Trres regiones entre el top 20 de accidentes

España sitúa además a tres regiones entre las veinte grandes zonas de siniestralidad europeas, aquellas con una población entre tres y siete millones de habitantes. En cuanto al número total de accidentes, Cataluña fue la segunda región en la que más se registraron, 21.895, sólo por detrás de Lombardía, en Italia.

La Comunidad de Madrid (13.476) y Andalucía (15.472) figuran también entre las que superan los 10.000 accidentes al año, lo que únicamente sucede en algunas zonas de Francia y de Italia. En comparación con el número total de habitantes también figuran entre las primeras regiones del continente las ciudades de Ceuta y de Melilla.

25% de los vehículos tiene más de 20 años

Parte de la culpa de estas cifras la tiene el avejentado parque móvil español. Cuatro años consecutivos con un mercado del automóvil a la baja están provocando un paulatino y constante envejecimiento del parque automovilístico español, que no se renueva. Desde el año 2019 no se superan los 1,2 millones de unidades matriculadas y en el ejercicio pasado los coches nuevos vendidos en nuestro país estuvieron solo en el entorno de las novecientas cincuenta mil unidades.

Por todo ello, la antigüedad del parque móvil que circula por España sigue al alza y supera ya los 14 años de media. En concreto, los turismos tienen de media 14,2 años.

Pero lo realmente preocupante del aumento de la edad media del parque es que continúan en circulación cada vez más vehículos de más de veinte años. De hecho, por franja de edad, son los mayoritarios en turismos, comerciales e industriales. En total, 7.782.321 vehículos superan las dos décadas, lo que se traduce en el 25,3% del total. Es decir, uno de cada cuatro de los vehículos que vemos por nuestras carreteras tiene más de dos décadas de antigüedad.

Puntos negros

Pero no todo es atribuible al envejecido parque móvil. En España hay 1.836 kilómetros de la red viaria con un alto índice de siniestralidad, el 8,2% del total, según el RACE.

Al margen de las autovías A-8 –que recorre la costa norte de España desde Galicia hasta el País Vasco y presenta un 14 % de siniestralidad– y de la Autovía del Mediterráneo A-7, que concentra elevada siniestralidad en Valencia y Málaga, donde el volumen de tráfico y las obras constantes complican la conducción, hay ocho tramos de carreteras que tienen un alto riesgo de siniestralidad perenne.

Entre las más peligrosas figuran la andaluza N-323, en concreto entre el punto kilométrico 172,5 y el 190,3, donde se registraron entre 2020 y 2022 un total de cuatro accidentes con heridos graves y otro en el que falleció una persona, y la N-634 en Cantabria, uno de los peores tramos de España. En los últimos años se han producido hasta siete accidentes graves entre Puente de San Miguel y Casar de Periedo. Diez kilómetros de pesadilla.