Los estibadores piden prejubilaciones voluntarias con un mínimo de 2.121 euros al mes

La contrapropuesta que los estibadores realizaron ayer al Gobierno para cerrar el conflicto abierto por la liberalización del sector incluye la petición de que aquellos que se acojan al plan de prejubilaciones voluntarias propuesto por las partes se retiren con una pensión mínima de 2.121 euros al mes.

La contrapropuesta que los estibadores realizaron ayer al Gobierno para cerrar el conflicto abierto por la liberalización del sector incluye la petición de que aquellos que se acojan al plan de prejubilaciones voluntarias propuesto por las partes se retiren con una pensión mínima de 2.121 euros al mes.

En el apartado de ayudas al sector, la oferta de la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar (CETM) y Comisiones Obreras (CC OO) solicitan al Gobierno fondos para los trabajadores “que voluntariamente rescindan su contrato, ya sea por razón de su edad o de los perjuicios que se deriven, en su caso, de la adaptación del derecho interno”.

Dichas ayudas, según su propuesta, consistirán en “un subsidio equivalente al 80% del promedio de las percepciones salariales por todos los conceptos correspondientes a los seis meses anteriores a la baja, con un mínimo de tres veces el salario mínimo interprofesional vigente en cada momento”. Para este ejercicio, el Ejecutivo fijó el SMI en 707,6 euros al mes, por lo que la jubilación mínima que exigen los sindicatos de la estiba equivale a 2.122 euros al mes. Tal cantidad representa el 83% de la pensión máxima, situada ahora en 2.567 euros al mes.

En la propuesta de acuerdo que el Gobierno realizó el pasado día 15, se ofrecía la posibilidad de que aquellos estibadores que tuvieran 50 años y quisieran acogerse a las prejubilaciones por considerarse negativamente afectados por la liberalización del sector o por su edad, percibirían un subsidido equivalente al 70% del promedio de las percepciones salariales de los seis meses anteriores a la baja, lo que supone un 10% menos de lo que piden los estibadores. Además, no se fijaba una pensión mínima, como pide el colectivo de carga y descarga de buques.

Tras aquella reunión fallida, que propició al día siguiente el rechazo en el Congreso del decreto para la liberalización del sector, uno de los representantes legales de los sindicatos argumentó que la oferta del Ejecutivo era insuficiente porque, en determinados casos, abocaba a algunos estibadores a jubilarse con pensiones de apenas 1.000 euros al mes.