Jubilación demorada: estas son las ventajas de alargar la vida laboral

Dejar de trabajar y disfrutar de una merecida pensión de jubilación es el sueño de muchas personas en nuestro país cuando cumplen los 65 años. No obstante, cumplir esta edad no implica necesariamente dar el paso a la jubilación, ya que este momento puede tardar en llegar más de la cuenta en el caso de aquellos que decidan alargar su vida laboral.

"La jubilación demorada es una opción voluntaria para aquellos trabajadores que hayan cumplido la edad ordinaria de jubilación y quieren alargar su vida laboral", tal y como explican desde el blog del Banco Santander. Esta modalidad estará disponible para los trabajadores por cuenta propia y ajena, así como para los funcionarios, militares e incluso ministros.

Para retrasar la edad de jubilación será necesario cumplir con una serie de requisitos como haber cotizado, como mínimo, 15 años a la Seguridad Social y tener cumplida la edad mínima de jubilación ordinaria para el año en curso.

Aquellos que opten por mantener su actividad profesional durante más tiempo tendrán un beneficio en forma de complemento económico cuando finalmente se retiren. Y es que, el trabajador irá acumulando una serie de inventivos por cada año que cotice y que complementarán su pensión final una vez se jubile.

Las empresas, cuyos trabajadores opten por alargar su vida laboral, también se verán beneficiadas. La entidad financiera asegura que estas "verán como las cotizaciones por contingencias comunes de esos empleados en particular quedan exentas, salvo por incapacidad temporal". En este supuesto, tendrían una reducción del 75% durante la incapacidad temporal del trabajador, siempre que haya superado los 62 años.

Complementos económicos por jubilarse más tarde

Los trabajadores que cumplan con los requisitos exigidos podrán acceder a un extra en su jubilación que puede ser de tres tipos:

• Aumento de la cuantía de la pensión: en caso de acogerse a la jubilación demorada, este trabajador recibirá un porcentaje adicional del 4% por cada año completo cotizado después de cumplir la edad ordinaria.
• Bonificación por demorar la jubilación: el pensionista recibirá una cantidad fija por año cotizado y que cobrará en un pago único cuando se llegue a la edad de jubilación. Su cuantía oscila entre los 5.000 y los 12.000 euros por año demorado y en función de los años cotizados.
• Opción mixta: es una combinación de las dos opciones anteriores. Quienes opten por esta opción y retrasen su jubilación entre dos y diez años, recibirán un incremento de su pensión del 2% por cada año de demora y, además, el pago único que equivaldría a la mitad del que les correspondería si optaran por la fórmula del pago único.

En 2022 el porcentaje de personas que optó por la jubilación demorada ascendió al 5,4% de las personas que se retiraron, mientras que en el primer trimestre de 2023 creció hasta el 7,8%, según datos del Gobierno.