Los efectos de la economía en los bolsillos de los ciudadanos particulares se dejaron sentir en 2023, un años en el que se registró un enorme crecimiento de las insolvencias. En total, en el pasado ejercicio, los concursos presentados ante los órganos judiciales crecieron un 52,9% con respecto al año anterior al sumar un total de 42.443. Pero el dato palmario es que, de todos ellos, 33.268 corresponden a concursos presentados por particulares sin actividad empresarial, que se dispararon un 114,2% frente a los datos de 2022.

Por el contrario, el resto de disminuyeron: los de personas jurídicas, que fueron 5.447, se redujeron un 22,9% y los 3.728 a personas naturales empresarios también decrecieron un 27,7%.

Según el último informe anual “Efectos de la crisis económica en los órganos judiciales”, del Servicio de Estadística del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la comunidad autónoma con mayor número de concursos presentados fue Cataluña, con un total de 12.075. Le siguieron Andalucía, con 6.310; Comunidad Valenciana, con 5.478 y Madrid, con 5.346.

Cataluña ha sido también el territorio donde se registraron más concursos de empresas ante los Juzgados de lo Mercantil, con 1.435 –el 26,3 % del total nacional-, seguido por Madrid, con 1.107 y la Comunidad Valenciana, con 714. Estas cifras son menores que en el año anterior y, en conjunto, estos concursos de empresas disminuyeron un 22,9% respecto a 2022.

Cataluña lidera los desahucios

Cataluña, con 7.148 procedimientos, fue la comunidad autónoma en la que se practicaron más desahucios en 2023, y concentra el 26,8% del total nacional, según las últimas estadísticas judiciales correspondientes al pasado ejercicio. Le siguen Andalucía, con 4.449 procedimientos; la Comunidad Valenciana, con 3.869; y Madrid, con 2.367, menos de un tercio que los que se produjeron en territorio catalán.

Los datos procedentes de los tribunales muestran que el año pasado se practicaron un 30,3% menos de desahucios en todo el territorio nacional, con un total de 26.659 procedimientos de este tipo. Los lanzamientos judiciales afectan a distintos tipos de inmuebles, no solo viviendas y, en el caso de estas, no solo a vivienda habitual.

Por otra parte, el número de ejecuciones hipotecarias iniciadas en 2023 fue de 19.577, un 21,5% menos que las iniciadas en 2022. En términos absolutos, Andalucía fue el territorio donde se presentaron más ejecuciones hipotecarias (4.551), seguido por Cataluña (3.457), la Comunidad Valenciana (3.100); Madrid (2.036), y Castilla-La Mancha (962).

Un 74,1% de los desahucios, 19.676, ha sido consecuencia de procedimientos derivados de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), mientras que otros 5.260 –el 19,7%- se derivaron de ejecuciones hipotecarias.

Los 1.723 restantes obedecieron a otras causas. Los desahucios por impago del alquiler experimentaron una disminución interanual del 28,5% respecto a 2022, y los derivados de ejecuciones hipotecarias del 38,2%.

En cuanto a los desalojos vinculados con la LAU, la clasificación la encabeza también Cataluña, con 5.158; le siguen Andalucía, con 2.961; la Comunidad Valenciana, con 2.673; y la Comunidad de Madrid, con 2.029. Los primeros puestos en cuanto a los desahucios consecuencia de ejecuciones hipotecarias los ocupan Cataluña (1.264); Andalucía (1.135); Comunidad Valenciana (1.049) y Murcia (315).