El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha dado a conocer hoy otro dato -y van ya unos cuantos- de que el mercado inmobiliario se ha dado la vuelta y ha dejado atrás la exuberancia que exhibió en los meses posteriores a la pandemia. La firma de hipotecas para vivienda retrocedió en febrero un 2%, hasta sumar 35.900 préstamos, según los datos difundidos hoy miércoles por el INE. Con este descenso, la firma de hipotecas retorna a tasas negativas después de que en enero subiera un 2,9% interanual. Antes de eso, en diciembre de 2022, este indicador registró un descenso interanual del 8,8% tras 21 meses de ascensos interanuales consecutivos. Un comportamiento similar al registrado por las compraventas, que tras recuperarse en el primer mes del año de la caída que sufrieron en diciembre, retrocedieron en febrero.

El retroceso en la firma de hipotecas ha venido acompañado de un sensible incremento de los tipos de interés, que ya sí, empiezan a reflejar las diferentes subidas aprobadas por el Banco Central Europeo (BCE) desde el verano pasado para contener la inflación. El tipo de interés medio para el total de préstamos hipotecarios se situó en febrero en el 3,21%, su cifra más elevada desde marzo de 2017, con un plazo medio de 23 años. En el caso de las viviendas, el interés medio en fue del 2,86%, por encima del 1,76% de un año antes y el más alto desde mayo de 2017 con un plazo medio de 24 años.

Las hipotecas no sólo empiezan a reflejar esas subidas del precio oficial del dinero sino el efecto que ha tenido en el mercado. Las subidas de tipos del BCE han propiciado que el euríbor se diera hace ya algo más de un año la vuelta y entrase en terreno positivo. Un cambio que motivó que las entidades financieras empezaran a mejorar sus ofertas de hipotecas variables para aprovechar esta subida y a encarecer cuando no directamente a eliminar las hipotecas fijas que habían empleado cuando el euríbor estaba en terreno negativo para proteger sus márgenes de rentabilidad. En febrero, el 34,3% de las hipotecas sobre viviendas se constituyeron a tipo variable, mientras que el 65,7% se firmaron a tipo fijo, diez puntos menos que en julio de 2022, cuando se alcanzó un máximo del 75,4%, lo que recoge el lento pero progresivo retroceso de estos productos.

Más retrocesos a la vista

La caída de febrero no será la última que veamos este año, según vaticinan desde el sector. Fotocasa ha advertido en un comunicado que esta cifra pone de manifiesto que la concesión de hipotecas empieza a ralentizarse, aunque de "forma paulatina", y asegura que ya refleja "el primer descenso oficial causado por el cambio en la política monetaria". No obstante, la directora de Estudios del portal inmobiliario, María Matos, cree que las cifras vuelven a la normalidad con niveles prepandemia y se mantienen en datos "muy positivos" que indican que el mercado hipotecario continúa "fuerte y estable".

Más pesimista se muestra el director general de idealista/hipotecas, Juan Villén, que pronostica caídas "más abruptas" en los próximos meses, como ya anticipan otros indicadores adelantados. "Debemos tener en cuenta que este dato incluye también el número de cambios de entidad en busca de mejores condiciones por parte de los ciudadanos. Es cierto que el coste de las nuevas hipotecas se ha encarecido en los últimos meses, pero todavía es posible encontrar operaciones fijas y mixtas por debajo del euríbor, por lo que posiblemente veamos nuevos encarecimientos por este motivo en los próximos meses", precisa Villén.

El director de Estudios del portal de pisos.com, Ferran Font, ha asegurado que los datos confirman la tendencia a la baja ya anticipada por otras estadísticas, aunque matiza que la actividad anual acumulada aún se mantiene "sutilmente al alza". El director de Estudios de pisos.com concluye que 2023 avanzará a "un escenario más moderado", que estará marcado por "el encarecimiento de las hipotecas y la incertidumbre generada por los cambios políticos y legislativos".