Descubre cómo puedes criticar a tu jefe sin que te despidan: es libertad de expresión, según Estrasburgo

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), ha declarado que las críticas hacia los superiores, son legales e incluso un derecho fundamental. Así lo ha dictaminado la institución jurídica en un fallo a raíz de un caso en Turquía, en el que un empleado reprochó a su jefe ciertas actitudes dentro de su empresa a través de un correo electrónico.

Concretamente, el trabajador, ingeniero informático en un banco turco, en 2017, remitió el correo al departamento de Recursos Humanos, con copia al director adjunto, en el que realizaba una comparativa sarcástica criticando la actitud de su jefe comparándolo con Jeff Bezos, dueño de Amazon.

El empleado, concretamente, criticó a su jefe por actitudes que, en su opinión, habían empeorado el ambiente laboral: distanciamiento con los empleados, estilo autoritario y mostrar favoritismo en las contrataciones, entre otros motivos.

Como consecuencia, el operario fue despedido al día siguiente, cuando la empresa argumentó que el email era despectivo, falso, burlesco y tenía términos insultantes y difamatorios.

No obstante, el TEDH, en un fallo del 20 de febrero, que fue unánime, aclaró que se vulneró la libertad de expresión del trabajador que recoge el artículo 10 del Convenio Europeo de Derechos Humanos.

Asimismo, concluyó que criticar la gestión de los superiores, aunque se emplee la sátira, no puede ser causa de despido ni de indisciplina si los comentarios son constructivos y no utilizan descalificaciones personales.

La institución, además, argumentó que el correo fue remitido a un grupo muy pequeño de personas y, por tanto, tuvo un impacto limitado en la compañía, y que considera que no hubo simetría entre la libertad de expresión del trabajador y el derecho del empresario a proteger sus intereses legítimos.

Requisitos para que las críticas sean legales

En consecuencia, para las críticas hacia los superiores se encuadren dentro de la libertad de expresión, se tienen que cumplir tres requisitos:

• Tienen que ser respetuosas
• Se tienen que enmarcar dentro de un contexto laboral
• No deben dañar la reputación de la empresa

Finalmente, la resolución del Tribunal es relevante para los empresarios y los trabajadores españoles debido a que la doctrina el TEDH es aplicable en los juzgados nacionales, y podría condicionar los posibles conflictos que surjan en situaciones similares.