Inflación

Díaz y Garzón aseguran que la gran distribución ha ganado “centenares de millones” y puede bajar precios en alimentos

La ministra asegura que su propuesta es legal y presiona para que las compañías ofrezcan un paquete de productos asequible y saludable

Yolanda Díaz y Alberto Garzón han vuelto a tirar de uno de los argumentos fetiche del ala más radical del Gobierno para exprimir a las empresas: sus beneficios en tiempos de bonanza. El ministro de Consumo ha reclamado hoy lunes a las grandes distribuidoras un “esfuerzo adicional mayor”para contener la cesta de la compra y ayudar así a las familiasy ha recordado que muchas “han tenido centenares de millones de euros de beneficio” en los últimos meses. “Tienen margen para ello”, le ha secundado la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo.

Aunque el rechazo frontal de todos los sectores ha llevado a Díaz a modificar su propuesta inicial de topar los precios de los alimentos básicos, la ministra de Trabajo, de la mano de su colega de Consumo, se han reunido hoy con representantes de las asociaciones de consumidores y de la gran distribución para presionar a estos últimos para que bajen los precios. Descartada ya la intervención directa de los precios, lo que ambos ministerios pretenden ahora es que estos supermercados ofrezcan una cesta de la compra de calidad “que facilite una alimentación sana” y a precios asequibles, según ha detallado Díaz. Aunque el contenido de cada cesta correría a cargo de cada compañía de distribución y el Gobierno no intervendría en su composición, el objetivo de Díaz y Garzón no está exento de intervencionismo dado que pretenden que contenga productos frescos, pescado, carne, frutas, hortalizas, huevos y lácteos.

Para que cumpla con los requisitos de calidad, Garzón ha recordado que la Agencia de Salud Alimentaria está elaborando una guía que pretende sea la referencia para que los supermercados elaboren dicha cesta, según ha precisado el ministro.

Competencia

Desde que Díaz lanzara su idea de topar los precios de algunos alimentos básicos, se han generado dudas sobre la posible ilegalidad de la medida. La semana pasada, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNCM) advirtió de que cualquier acuerdo entre operadores para fijar precios máximos en algunos alimentos está prohibido por ley. Pero hoy, Díaz ha recalcado que la propuesta no solo respeta el derecho de la competencia, sino que abunda en él, al tiempo que ha señalado que la Ley de Comercio cuenta con “excepciones” en esta materia. En concreto, desde Trabajo han recordado que el artículo 13 de la ley de Ordenación del Comercio Minorista, en relación a la libertad de precios, establece que los precios de venta de los artículos serán libremente determinados y ofertados con carácter general de acuerdo con lo dispuesto en la legislación de defensa de la libre y leal competencia, con las excepciones establecidas en leyes especiales. No obstante, señala que “el Gobierno del Estado, previa audiencia de los sectores afectados, podrá fijar los precios o los márgenes de comercialización de determinados productos, así como someter sus modificaciones a control o a previa autorización administrativa”.

Esta capacidad está prevista en varios supuestos: cuando se trate de productos de primera necesidad o de materias primas estratégicas, cuando se trate de bienes producidos o comercializados en régimen de monopolio o mediante concesión administrativa, como medida complementaria de las políticas de regulación de producciones o de subvenciones u otras ayudas a empresas o sectores específicos, y excepcionalmente y mientras persistan las circunstancias que aconsejen la intervención, cuando, en un sector determinado, se aprecie ausencia de competencia efectiva.

Otros que se han levantado en contra de la medida son los pequeños comercios al considerar que, si la gran distribución presiona con los precios, no podrán competir con ellos y estarán en riesgo miles de empleos. Díaz, que no ha mostrado argumentos para rebatir esta preocupación, se ha limitado a este respecto a instar a la ciudadanía a comprar en el comercio local y de proximidad y ha pedido también que se escojan productos de temporada. “Esto tiene que ver con el cambio climático y tiene que ver con la alimentación de calidad”, ha dicho.