La española, que acabó con problemas físicos, cae con Wozniacki (6-0, 6-7 [3/7] y 6-2) en la antepenúltima ronda, que nunca ha superado en un «grande»

Carla Suárez sacó carácter después de perder el primer set por 6-0, pero esta vez no pudo remontar como sí había hecho en la tercera ronda y en los octavos de final. La danesa Wozniacki era la favorita, pero le costó y también tuvo que agarrase la pista para regresar después de un momento malo en el segundo set. Carla y Wozniacki son dos tenistas sin un golpe definitivo, pero sólidas. Los intercambios eran eternos. 20 veces pasaba la bola por encima de la red hasta que el punto se decidía. En el primer set casi siempre lo hizo del lado de la danesa, más fina y un poco más agresiva. Pero si algo ha demostrado la grancanaria en este Abierto de Australia es paciencia. No se puso nerviosa y metió una marcha más: tiros más profundos para dominar con su derecha y sacar a relucir su precioso revés a una mano. Con más intención, abriendo ángulos, logró un «break» Carla, en blanco, para situarse 3-2. La réplica de su rival tardó en llegar, pero lo hizo para poner el 4-4. Sin problemas. No cambió Carla su forma de jugar, mantuvo el punto de agresividad y la solidez y el «tie break» lo dominó de principio a fin, con un par de revesazos fantásticos.

La inercia parecía positiva para Suárez, otra remontada la esperaba, pero si algo caracteriza a Wozniacki es que es una roca, y fuerte de cabeza, como demostró en el encuentro ante Fett, que ganó cuando perdía 5-1 y 40-15 en el tercer set. Poco a poco fue recuperando la pista la danesa y más metida dentro pasó a dominar, mientras a la española le costaba algo más moverse por problemas físicos. Llegaba un poco tarde a golpear. Pero en tenis un poco es el día y la noche.

Carla Suárez volvió a perder en los cuartos del Abierto de Australia, su límite. Ya cayó en esa ronda en 2009 y 2016, y también hasta ahí llegó en Roland Garros 2008 y 2014 y en el Abierto de Estados Unidos de 2013. La buena noticia es que los hombros que tanta guerra le han dado el último año parecen curados y puede volver a jugar sin dolor.