MotoGP / GP de la Solidaridad

Martín-Bagnaia, un duelo por el título de MotoGP sin puñaladas por la espalda

Jorge y Pecco se juegan el Mundial de MotoGP este fin de semana en Barcelona. Ninguno tiene preparados juegos psicológicos, no es su estilo

Jorge Martín y Pecco Bagnaia, este jueves en el circuito de Barcelona
Jorge Martín y Pecco Bagnaia, este jueves en el circuito de BarcelonaAgencia EFE

Queda muy lejos el asfixiante final de campeonato en 2015, con un ambiente irrespirable entre Marc Márquez y Valentino Rossi, que venía de la patada de Malasia y que explotó del todo con la sanción del TAS al italiano y sus acusaciones de «biscotto» español en una rueda de prensa histórica. Es cosa del pasado la famosa frase de Stoner a Rossi en Jerez en 2011, cuando el australiano respondió a la petición de perdón de Valentino con un: «Tu ambición ha sido más grande que tu talento». En otra época, Pedrosa y Lorenzo ni se miraban y tuvo que llegar el rey Juan Carlos para obligarlos a darse la mano en lo más alto del podio.

Que nadie espere algo así este fin de semana en Montmeló, con Bagnaia y Martín jugándose el título a su manera, a su estilo, sin bravuconadas típicas de las ceremonias del pesaje de los grandes combates de boxeo. Los dos luchan por el sueño de sus vidas, pero se llevan bien, se respetan y no usan esos juegos mentales que otros pilotos convirtieron en algo mítico, metiendo presión hasta en el parking del circuito. «Es una rivalidad chula, no estamos acostumbrados a ver este tipo de rivalidades, en las que los dos nos llevamos bien, pero me gusta que sea así. No voy a tratar de generar nada extraño. Lo que tenga que suceder, sucederá», decía Bagnaia en el arranque del GP de la solidaridad, el que va a definir el Mundial de MotoGP 2024.

Al italiano no le basta con ser perfecto en las dos carreras. Sumar el pleno de 37 puntos no le garantiza nada, necesita además un fallo grande de Jorge Martín para que le salgan las cuentas. Pero cuando le preguntan por estrategias extrañas en busca del error del rival, es muy claro, va a ser que no. «Los dos nos merecemos el título por cómo hemos trabajado. He cometido muchos errores y él ha sido más regular que yo. Luego yo he estado mejor en términos de resultados puros: con seis Sprints y diez victorias. Así que los dos nos lo merecemos de alguna manera. Me alegraré si lo gana Jorge, aunque suene extraño, porque lo conozco y sé que se lo merece», explicaba con toda naturalidad, lo que a algunas viejas glorias ni se les ocurriría pensar de un rival. «A mí no me han funcionado los juegos mentales, nunca me han gustado y no los voy a hacer. Al final acabas perdiendo tiempo. Lo mejor es centrarte en ti, hacer todo perfecto e ir decidiendo en la carrera», terminaba Pecco.

Al otro lado del cuadrilátero, en el rincón de Martín, el discurso es el mismo. «Nos respetamos mucho, nos conocemos desde que éramos pequeños. Quizá, si el rival fuese otro, no habría esta relación, pero con Pecco es así. Pecco es uno de los más limpios de la parrilla. Creo que eso tampoco lo quiere perder. No quiere cambiar la percepción que se tiene de él por empezar a pilotar ‘guarro’ durante el fin de semana», lanzaba Jorge, después de un viernes con poca temperatura. «Tengo más confianza en la carrera larga, no quiero precipitarme», decía sobre su primera bola de partido. Si este sábado gana el Sprint se acaba todo, pero también puede cocinarlo a fuego lento y sumar entre los dos días los catorce puntos que necesita.