Fútbol

Girona-Real Madrid: Castellanos confunde al Real Madrid

Cuatro goles del delantero del Girona hundieron al equipo de Ancelotti, que estuvo horroroso en el apartado defensivo.El mejor, de nuevo Vinicius, que luchó contra todo

GIRONA, 25/04/2023.- El delantero argentino del Girona FC Taty Castellanos cabecea el balón para anotar el 3-0 durante el encuentro correspondiente a la jornada 31 de LaLiga Santander disputado entre el Girona FC y el Real Madrid en el estadio Montilivi de Girona, este martes. EFE/ David Borrat
Girona FC vs Real Madrid. Castellanos marcó cuatro golesDavid BorratAgencia EFE

LaLiga se le puede hacer muy larga al Real Madrid, ya sí desconectado de todo lo que pueda pasar en el campeonato, como si la victoria del Barcelona contra el Atlético el fin de semana hubiese puesto el punto final a la emoción. Se le va a hacer larga, además, porque los delanteros rivales están viendo que es un chollo enfrentarse a una defensa tan poco concentrada en estos partidos. Se lució Chukwueze, el delantero del Villarreal, que hace semanas vivió en el Bernabéu su mejor noche como futbolista y le imitó Castellanos, que llevaba ocho goles en LaLiga hasta este duelo contra el Real Madrid y sumó la mitad. Una noche inolvidable para el delantero argentino. Cada vez que llegaba hacía un roto a la parte de atrás del equipo de Ancelotti, que, en realidad, fue un roto todo el encuentro, fuera de lugar, tomando malas decisiones e impotente para un delantero que pocas veces va a vivir algo así.

LaLiga le servía al Real Madrid para mantener el tono, a la espera de los partidos decisivos, tres o cuatro que le quedan ya, pero lo mejor va a ser no fijarse mucho, no sacar conclusiones o extrapolar lo que pase en estos duelos entre semana, al esprint, con los que no podía ganar LaLiga y sí podía dejarse, como sucedió en Girona, una pizca de entusiasmo ante lo que le espera de verdad.

Cuatro partidos sin recibir un gol llevaban los de Carlo Ancelotti y cuatro se llevaron del rival. Todo salió torcido y el equipo se fue apartando del partido y dejando ya detrás LaLiga.

No empezó bien el día con la gastroenteritis de Courtois. El técnico italiano había asegurado que Lunin iba a tener más minutos, pero no esperaba que fuese tan pronto y de manera tan sorprendente. Y tan dramática para el equipo. Lunin fue titular más por obligación que por elección y no eligió el mejor día para serlo. Hizo una parada y poco más. Todo lo que tiraba Castellanos iba dentro, sin que el portero ucraniano mostrase excesiva oposición. No es fácil ser la sombra de Courtois y Lunin ha aguantado bien, pero puede que la goleada de Girona haya definido su futuro en el club madridista.

No le ayudó nadie, la verdad. Sobre todo, fue una dimisión de Militao, el futbolista sobre el que sostiene todo la defensa blanca y que ayer tuvo uno de esos partidos que a veces le salían y que hacía mucho que no se le veían: fuera del partido, demasiado optimista, la describiría Ancelotti. Perdió los casi todos los duelos en campo abierto, que son su especialidad, cuando al oír sus pisadas, tiemblan los delanteros, pero es que también le ganaron por alto, en algún gol se vio, incluso, que no saltaba. La esperanza del Madrid es que ya ha tenido su partido de distracción.

Nacho, en la banda izquierda, tampoco fue de gran ayuda. El canterano ha hecho buenos partidos esta temporada, pero también se le ha visto superado en muchos momentos. Con aún esperanzas de remontar, Ancelotti le quitó por Camavinga. En realidad, si nos ponemos a señalar a futbolistas del equipo de Ancelotti, pocos se salvarían, sólo Vinicius, que fue a la guerra, aunque nadie le acompañara. Fue la guerra y casi no es metafórico, porque el brasileño se pegó con su lateral, con el central que pasaba por su lado y también con el público y con el árbitro. Fue un partido de esos en los que está excitado y los defensas le buscan hasta la desesperación.

Aún así Vinicius marcó el único tanto del encuentro, cuando el Madrid creyó que podía hacer algo en Girona. Y dio el segundo tanto, al final, a Lucas Vázquez, un futbolista que parecía que Ancelotti había olvidado.

Se puede decir que el Real Madrid dominó, que tuvo la pelota, al peor ritmo de Modric y Kroos, ese que ha provocado tantas dudas acerca del futuro de una pareja a la que se le deben todos los homenajes del mundo y de la que aún se puede esperar lo mejor en la Copa y Champions. Pero no hubo velocidad. Rodrygo desapareció de delantero centro y Asensio dejó un pase. Todo era dársela a Vinicius y dejarle que fuese a la guerra, a ver qué pasaba. Algo que suele funcionar. Pero para eso hay que defender bien.