Pacto fiscal

¿Cuánto pagan de IRPF los futbolistas en España?

Los futbolistas deben declarar el 85% de sus ingresos pero tienen la opción de declarar un 15% como derechos de imagen a través de sociedades para obtener ventajas fiscales

Real Madrid vs Barcelona en el Bernabeu
Real Madrid vs Barcelona en el Bernabeu. David JarDavid JarFotógrafos

La reforma tributaria del Gobierno se ha convertido en uno de los asuntos más debatidos en los últimos días. El impuesto a energéticas, a banca y diésel, la subida a somicis y pisos turísticos o el alza del IRPF al ahorro siguen en el aire mientras persiste la pelea entre el Ejecutivo en sus socios. Pero al margen de cómo pueda afectar a empresas y ciudadanos, ¿Sabes cuánto pagan de IRPF los futbolistas en España?

Los futbolistas tributan como cualquier español en función de su salario. El convenio colectivo de AFE y LaLiga está vigente desde 2015 y fue prorrogado el pasado año hasta 2026. La última renovación del convenio entre LaLiga y la AFE estableció una subida de los salarios mínimos que cobran los futbolistas en España, tanto en LaLiga EA SPORTS como en LaLiga Hypermotion, algo por lo que los jugadores habían peleado y que finalmente pudieron conseguir. ¿Pero de qué cantidades estamos hablando?

Los salarios de los futbolistas

El sueldo mínimo para la temporada 24/25 es de 190.000 euros anuales, mientras que para la temporada 25/26 es de 195.000. Así son las cifras de acuerdo a lo que estipula el acuerdo de modificación del Convenio colectivo para la actividad del fútbol profesional suscrito entre la Liga Nacional de Fútbol Profesional (LNFP), en representación de las empresas del sector, y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE).

Temporada 22/23: 182.046 euros

Temporada 23/24: 186.000 euros

Temporada 24/25: 190.000 euros

Temporada 25/26: 195.000 euros

Por otra parte, los jugadores tienen otros derechos laborales como las vacaciones pagadas o beneficios extra como el cobro de primas que negocian con sus propios clubes.

Sin embargo, las cifras reales son muy diferentes. Como en cualquier ámbito profesional, la remuneración depende en gran medida de la empresa o equipo en que trabajes. Por eso, incluso en una misma categoría puede haber grandes diferencias. En el caso de la Primera División, el jugador de fútbol que menos cobra en el Real Madrid o Fútbol Club Barcelona podría ser el mejor pagado -y ni eso- en un equipo recién ascendido.

En el Real Madrid por ejemplo -según unas cifras que adelantó Ok Fichajes- el ranking salarial lo lidera Kylian Mbappé con un sueldo anual de 31.250.000 euros, es decir 600.962 euros netos semanales. Le siguen David Alaba con 22.500.000 euros y Luka Modric con 21.880.000. Vinicius Jr. y Jude Bellingham comparten el mismo salario: 20.830.000 euros, lo que supone unos ingresos de 400.577 euros semanales, sin contar las primas.

En las filas blaugranas, el que más cobra en la actualidad es Robert Lewandowski con 33.330.000 (un sueldo semanal de 640.962 euros), le sigue Frenkie de Jong con 19 millones de euros.

Diferencias entre jugar en Madrid o en Barcelona

Y esos son los salarios por los que deben tributar. Su tributación en el IRPF se ajusta al máximo fiscal del 24,5% solo por el tramo nacional. A lo que hay que sumar el tramo autonómico. Es decir, los futbolistas pagan impuestos como cualquier español que gane por encima de los 300.000 euros anuales pero -por ejemplo- deben ingresar a Hacienda más o menos en función de si juegan en Madrid o en Barcelona.

El tramo autonómico en Cataluña para las rentas más altas se sitúa en el 25,50% mientras que en la Comunidad de Madrid es del 20,5. Es decir, un futbolista que juegue en el Barça o el Español deberá pagar en total el 50 % mientras que si pertenece a las filas de Real Madrid o Atlético debería desembolsar el 45%, lo que se traduce en cientos de miles de euros de diferencia.

En los últimos años, muchos futbolistas y entrenadores han tenido problemas con el fisco como Leo Messi, Luka Modric, Carlo Ancelotti o José Mourinho. En la actualidad, la mayoría de las estrellas gestionan los derechos de explotación a una compañía, que suele ser propiedad del deportista, tributando así por el Impuesto de Sociedades si su domicilio fiscal está en España, lo que suele ser mucho más ventajoso para ellos.