Evenepoel golpea fuerte a Roglic en el estreno del Giro

El Giro se presentaba como una carrera de dos, una pelea entre el veterano Primoz Roglic y el joven Remco Evenepoel, pero el belga se ha esforzado desde el comienzo en que se piense en un solo favorito para la carrera italiana. En los menos de 20 kilómetros de recorrido de la contrarreloj que servía como estreno del Giro aventajó en 43 segundos a su gran rival, que sufrió un bloqueo parecido al que le costó perder el Tour de 2020 ante Pogacar en la cronoescalada de la Planche des Belles Filles.

La organización los reservó para la última tanda de corredores, igual que a Filippo Ganna, uno de los mejores especialistas del mundo en la lucha contra el reloj. Y Roglic salía por detrás de Evenepoel, sufriendo y rumiando los tiempos que iba marcando el belga. Fue contraproducente el orden de salida para el tres veces ganador de la Vuelta. 43 segundos son muchos para tener que recortarlos ya desde la primera etapa. A pesar de la distancia, el esloveno es sexto en la general, lo que da muestra de la superioridad de Remco en la primera etapa. Ganna ocupa la segunda plaza a 22 segundos y el portugués Almeida, otro de los candidatos, es tercero a 29. Todos los demás ya están a 40 segundos o más de distancia. Como Tao Geoghegan Hart. el ganador del Giro de 2020, y Stefan Kung, otro de los especialistas en la lucha copntra el crono, que está igualado a Roglic. Geraint Thomas y Aleksandr Vlasov, otros dos candidatos al podio final, están ya a 55 segundos.

«Ha sido una manera perfecta de volver al Giro, estoy muy contento. He venido a la contrarreloj como si fuera un campeonato del mundo porque quería llevarme la maglia rosa», explicó el primer líder de la carrera después de su exhibición. «Trabajé mucho para esto, quería estar entre los mejores de inmediato e ir lo más rápido posible. Por el momento estoy disfrutando de esta victoria», añadía.

Evenepoel tenía una cuenta pendiente con el Giro, sólo lo ha corrido una vez y tuvo que retirarse en la novena etapa. Pero las circunstancias eran muy diferentes. En aquel momento el Giro significaba prácticamente su reaparición después de sui terrible caída en el Lombardía del año anterior. Ahora, y después de haber ganado la última Vuelta a España, sus retos son otros, ser líder de principio a fin de la carrera. Pero «siempre hay que tener cuidado, los peligros están a la vuelta de la esquina», advierte.