Cuartos de final
España se recupera a -198 grados con las máquinas que utiliza Topuria
La Roja es la única selección de la Eurocopa que cuenta con la tecnología de recuperación más avanzada a base de crioterapia, una cámara hiperbárica y otra cámara de luz roja
Dicen los ciclistas que las grandes vueltas se ganan en la cama. La recuperación es una parte fundamental de la preparación del deportista y la selección española va un poco más allá de las ocho horas de sueño tradicionales. En su hotel de concentración en Donauschingen cuenta con la tecnología más avanzada para favorecer la recuperación de los internacionales, incluso en el trato de lesiones.
«Es un triángulo de recuperación. Son tres pasos», explica Roberto Rocha, el director de ventas de CTN.FI, la empresa con sede en La Nucía que pone esta tecnología al servicio de la selección que dirige Luis de la Fuente.
«El primer paso es hiperoxigenar el cuerpo y las células para tener una mejor resistencia y una limpieza celular y obtener con ello un mejor rendimiento», dice Rocha. Ese paso se da dentro de la cámara hiperbárica, mucho más evolucionada de lo que podía verse hasta ahora. «Había cámaras hiperbáricas, pero eran médicas, no podías entrar con móvil, tablet u ordenador. Eran muy costosas de instalar, con bombonas que se acababan muy rápido», añade.
«A partir de ahí pasamos a una cámara de frío, llamada e-cabina, que es la única del mercado inteligente y eléctrica. Lo que la hace muy segura es que estamos midiendo el cuerpo del deportista en todo momento. La ponemos a -198 grados y llevamos el cuerpo del deportista a siete grados. Lo que hacemos es que el órgano más grande del cuerpo, que es la piel, emita al cerebro un estado de alerta, un shock térmico, que acelera el corazón. Y como tenemos el corazón acelerado provocamos un riego sanguíneo muy veloz, lleno de oxígeno porque antes estuvimos una hora en la cámara hiperbárica, y aparte saca la adrenalina, las endorfinas y las 17 enzimas para la supervivencia, porque el cerebro está diciendo “nos estamos muriendo, no sabemos por qué”. Lo que el cerebro no sabe es que son solo tres minutos. Esto genera una vasoconstricción muy potente», continúa Rocha.
Para finalizar, queda el tratamiento con calor. «Luego pasamos a una cámara de luz roja Led Pro, que lo que provoca es una vasodilatación que hace que la sangre fluya como una autopista ya con las 17 enzimas de la supervivencia más el oxígeno y permite recuperar el cuerpo del deportista en la mitad del tiempo que un cuerpo normal. Deportistas que están compitiendo cada dos o tres días al día siguiente están al cien por cien», afirma el director de ventas de CTN.FI.
La crioterapia se utiliza desde hace muchos años, pero no de manera tan precisa. En las piscinas de hielo se controla la temperatura del agua y el cuerpo solo se sumerge de cintura para abajo. En la e-cabina el frío se aplica en todo el cuerpo y controlado de manera precisa. «Cuando una célula baja de siete grados la máquina inteligentemente deja de aplicar frío en esa parte del cuerpo. El resto del cuerpo sigue recibiendo hasta que llega a siete. Entonces la máquina lo mantiene a siete hasta el minuto tres. Y ahí se acabó el tratamiento», cuenta Rocha.
«Contactaron con nosotros a raíz de que vieron en televisión a Ilia Topuria y por la relación de Ilia con Ferran debió de haber una conexión y se pusieron en contacto con nosotros», confiesa el director de ventas de la empresa.
Topuria es embajador de la marca CTN.FI. Comenzó a trabajar con ellos tres meses antes de disputar el título de UFC y ahora sigue utilizando esta tecnología cada día. «Todas las mañanas, Topuria hace el triángulo de recuperación para despertar, sacar la adrenalina y ponerse como una moto a pelear, a golpear o a hacer sparring, Entrena sus ocho horas diarias y luego a las 8 de la noche vuelve a hacerlo para recuperar el cuerpo, los músculos y encima dormir mejor de un tirón», cuenta Rocha.
Gedeón Guardiola, el capitán de la selección de balonmano sufrió una rotura muscular que lo descartaba para los Juegos, pero las máquinas de CTN.FI lo están acercando al objetivo olímpico. «En el sexto tratamiento ya le cerramos la lesión. El día 11 tiene una prueba en Madrid para ver si está bien y puede ir a París», dice Rocha.
Los deportistas empiezan a notar los efectos a partir de la segunda sesión. «En la primera van a estar aturdidos, cansados, un poco perdidos, porque no saben hacer la respiración, hay que respirar muy bien dentro de la cámara para llenar los pulmones, volver a extraerlo; en la crioterapia hay que cerrar los ojos, concentrarse, aguantar. Es todo mental, es el frío o tú, hay que saber que hay que aguantar ese sufrimiento, notar cómo se acelera el corazón y cómo te llega la sangre a todo el cuerpo», afirma Roberto.
España es la única selección en la Eurocopa que cuenta con esta tecnología. La Roja va ganando en el descanso.
✕
Accede a tu cuenta para comentar