Así explica Simeone el cambio de Luis Suárez y el cabreo del delantero uruguayo

Nadie, Luis Suárez el primero, imaginaba que necesitando dos goles y a falta de media hora para el final, Simeone decidiera que el delantero uruguayo abandonase el terreno de juego. Una decisión controvertida teniendo en cuenta que el punta es el futbolista con más goles anotados en la plantilla rojiblanca en lo que va de temporada. Y por mucho que su racha en Champions fuera de casa sea malísima y que todavía no se haya estrenado en Europa con el Atlético, no parecía lo más lógico.

Salió enfadadísimo del terreno de juego el punta, con una sonrisa entre nerviosa e irónica que denotaba el fuego que llevaba dentro. Se sentó en la grada y más que quitarse las botas y las medias se las arrancaba con rabia mientras hablaba por lo bajo para que nadie lo escuchara. «Es normal que Luis quisiera seguir jugando. Con Llorente a la derecha, con Correa, con Lemar por dentro, con Dembélé pensábamos que podíamos encontrar otra vía de movilidad para atacar y por eso hicimos el cambio», explicaba Simeone tras su decisión.

«Quizá sea un buen día para que rompa su racha», decía en la previa Simeone sobre los cinco años, seis meses y un día que llevaba Suárez sin marcar un tanto en Champions como visitante. En Liga suma 18 goles y le está peleando el Pichichi a Messi. No hay duda de que los rojiblancos están líderes destacados en este torneo por la pólvora y el oportunismo de su número «9» y por eso resultó raro verlo salir del campo con tanto tiempo por delante.

Quizá sintió una falta de confianza desde el banquillo a la que está acostumbrado Joao Félix, muy suplente últimamente y que en cambio en Londres fue titular y se mantuvo todo el tiempo sobre el césped. El portugués necesitó 76 minutos para probar a Mendy de manera seria, pero su entrenador quedó encantado con su actuación. «Quizá sea el mejor partido de Joao desde que está en el equipo. Continuidad, regularidad, es el futbolista que queremos, sin duda. Nos servirá para lo que viene», seguía Simeone, que varias veces reconoció la superioridad del Chelsea y no quiso excusarse en los penaltis.

La Champions le está dando la espalda al Atlético últimamente. Hace tres años no pasó la fase de grupos, hace dos cayó en octavos, el curso pasado llegó a la fase final de Lisboa y se vio sorprendido por el Leipzig en cuartos, y ahora vuelve a quedarse fuera de los ocho mejores sin haber sido capaz en 180 minutos de hacer algo de daño a los de Thomas Tuchel.