Espacio
Europa se traiciona a pocos días del despegue del cohete Ariane 6: nos vamos con Musk
Eumetsat ha decidido apostar por la americana Space X y dejar en la estacada a la ESA con el Ariane 6 de Arianespace
Estamos viviendo los albores del siglo espacial o, al menos, de nuestro primer siglo verdaderamente espacial. Poner un cohete como el Ariane 6 en órbita ya no es una cuestión de orgullo nacional ni de retos tecnológicos, es de supervivencia. El espacio son las nuevas praderas y desiertos americanos, tierras indómitas que, si bien no carecen de ley, tampoco la tienen muy presentes. Promesas de futuro con un potencial casi inagotable, y serán los pioneros quienes exploten sus maravillas. Dicho de otro modo: el que primero llegue se lo queda, y no podemos permitirnos ser los segundos.
Por eso es tan importante garantizar que Europa mantenga su autonomía para acceder al espacio y que cada vez dependa menos de potencias extranjeras. O, al menos, esa es la teoría, porque entre la actualidad aeroespacial hay lugar para la traición.Arianespace, la compañía francesa que lleva décadas lanzando proyectos europeos al espacio, está a punto de lanzar su flamante Ariane 6 por primera vez, un cohete que tendría que haber despegado en 2020 y que promete aumentar nuestra autonomía espacial como continente. La idea es que, en su tercer lanzamiento, programado para 2025, un Ariane 6 pusiera en órbita el satélite meteorológico europeo Meteosat MTG-S1, sin embargo, a unos días de su primer lanzamiento, Europa se ha traicionado a sí misma.
Los protagonistas
El Meteosat MTG-S1 es un satélite que depende de Eumetsat, la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos y acaba de romper su compromiso con Arianespace. Ya no será la empresa francesa quien ponga en órbita su satélite el año que viene. Han decidido confiarle tal misión a la empresa americana Space X, que lanzará el Meteosat MTG-S1 en un Falcon 9. Europa ha cedido ponerse palos en las ruedas y algunas autoridades del sector espacial ya se han mostrado desconcertadas.
Josef Aschbacher, director general de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha tuiteado las siguientes palabras: “Sorprendente la decisión de Eumetsat de lanzar su satélite con el Falcon 9 de Space X en lugar del Ariane 6 sin esperar al vuelo inaugural para tomar la decisión. Es difícil de comprender, sobre todo porque Ariane 6 tiene todo en orden para su primer vuelo el 9 de julio. Ahora es el momento para que Europa apoye el acceso autónomo al espacio, que está en el horizonte”. Y, entre tanta confusión asoman algunos posibles motivos tras esta traición intestina.
El problema
A todos nos gusta especular y, en este caso, los aficionados al espacio han llenado las redes con suposiciones. Muchos apuntan que, posiblemente, Eumetsat haya dejado tirado a Arianespace y a la ESA por los retrasos acumulados en el proyecto Ariane 6. Y sí, es cierto que su primer lanzamiento estaba programado para 2020, pero la pandemia y una serie de inconvenientes nos han traído hasta 2024. Sin embargo, todo apunta que el primer lanzamiento será el 9 de julio y hay tiempo para hacer un lanzamiento más del cohete antes de que le llegue el turno al Meteosat MTG-S1 que, por cierto, también acumula retrasos. Los motivos temporales no parecen suficientes.
Otras voces sugieren que el motivo es más estratégico. Hasta los últimos retrasos, estaba previsto que el lanzamiento del Meteosat MTG-S1 fuera a bordo de un Ariane 64, un tipo de cohete Ariane con cuatro propulsores. Sin embargo, la información más reciente apuntaba a un Ariane 62, con solo dos propulsores. Esto significa que, probablemente, el satélite tendría que usar parte de su combustible para el último empujón antes de entrar en órbita y, así, compensar la menor potencia del Ariane utilizado. Y, si el satélite tuviera que gastar combustible, tendría menos para llevar a cabo sus funciones una vez estuviera en órbita, o, dicho de otro modo: su vida útil sería más corta y, por lo tanto, la misión menos eficiente.
¿Y ahora qué?
Es difícil imaginar que el cambio de parecer de Eumetsat se deba solo a falta de confianza, porque estamos a unos días de que las intuiciones pudieran confirmarse o desmentirse, dando información muy relevante acerca de cuánta confianza merecen. Habrá que esperar para ver cómo se desarrolla esta situación, si el Ariane 6 triunfa en su primer lanzamiento y, por supuesto, cómo afecta al panorama aeroespacial europeo.
Sin ir más lejos, el director del Centro Nacional de Estudios Espaciales (Francia), ha propuesto legislar que, en la medida de lo posible, los lanzamientos institucionales europeos hagan uso de cohetes europeos. Porque, cuando hablamos de que estamos en el amanecer de una era espacial no solo hablamos de las historias cósmicas que nos esperan, sino de la farragosa burocracia que cubrirá a esta nueva aventura de la humanidad.
QUE NO TE LA CUELEN:
- Los motivos, posiblemente, son más complejos. Es más, aunque puede haber sido una mala apuesta para Europa, si la viabilidad del Meteosat MTG-S1 está comprometida, Eumestat puede haber tomado esta medida como algo puntual, y no como una política que vaya a definir sus futuras acciones. De hecho, desde Eumestat hacen referencia específicamente a que están ante unas circunstancias excepcionales.
REFERENCIAS (MLA):
- “CNES Chief Responds Harshly to EUMETSAT’s Decision to Ditch Ariane 6.” European Spaceflight, 1.
- “Ariane 6 Overview.” ESA - Enabling Support, 2.
- “Ariane 6: Informe de Actualización Conjunto (21 de mayo de 2024).” ESA - Space in Member States: Spain, 3.
- “Ariane.” ESA - Enabling Support: Space Transportation