Este es el deslumbrante pueblo de España que es tendencia en este 2025

Nuevamente un pueblo de Castilla y León está siendo tendencia para este recién estrenado 2025. Y es que el turismo rural continúa ganando adeptos. Unos destinos que destacan por su autenticidad, paisajes espectaculares y un ritmo de vida pausado que fomenta el bienestar y la conexión con la naturaleza.

Y entre esos destinos, que son dos, se ha colado un lugar de Castilla y León. El otro es La Hermida, en Cantabria. Pero el ubicado en tierras castellano y leonesas, según las predicciones de Viajes de Booking.com, se halla en tierras de la provincias de Burgos, y es conocido como el pueblo de las mil cascadas.

Estamos hablando de Orbaneja del Castillo, ubicado en plena comarca de Las Merindades. Una localidad que parece sacada de un cuento, al tratarse de un pequeño pueblo de origen medieval donde se haya una de las cascadas más deslumbrantes de España. Su ubicación, en un entorno privilegiado, en el Cañón del Ebro, hace que mes tras mes, sean numerosos los turistas que se acercan hasta este lugar para disfrutar de unas vistas espectaculares.

En la provincia de Burgos, en plena comarca de Las Merindades, se encuentra un lugar que parece sacado de un cuento: Orbaneja del Castillo, un pequeño pueblo de origen medieval que alberga una de las cascadas más impresionantes de España. Este destino no solo es famoso por su belleza natural, sino también por su patrimonio histórico y su ubicación en un entorno privilegiado, el Cañón del Ebro. En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre este pintoresco pueblo y cómo disfrutar de su icónica cascada.

La población se encuentra a unos 60 kilómetros de Burgos, siendo, por su rica arquitectura y su entorno natural, Conjunto Histórico-Artístico. Pero el gran atractivo es la cascada que se encuentran en mitad de la localidad. Unas aguas cristalinas que se deslizan por varios saltos a los pies del pueblo, con una altura de unos 25 metros, y que proceden de una caverna kástica.

Una de las características más llamativas es el color del agua, con un turquesa intenso, por los minerales disueltos y que va recogiendo a su paso. Los visitantes quedan maravillados por este espectáculo en un entorno mágico, ya que se puede pasear por sus puentes de piedra y sus calles que parecen de otro siglo.

Y además, este lugar es idóneo para realizar rutas de senderismo por la zona, con paisajes donde se pueden ver desde miradores naturales y donde se puede descubrir a aves rapaces surcando los cielos o descansado en las rocas como el buitre leonado o el águila real.

Y para los que deseen pernoctar o comer en la localidad hay varios alojamientos de turismo rural y restaurantes que ofrecen platos típicos como el cordero asado, quesos de oveja o embutidos de la zona.