El Ayuntamiento de la localidad burgalesa de Aranda de Duero ha decidido personarse como acusación particular en el proceso judicial relacionado con los actos vandálicos perpetrados recientemente en los baños del Picón, “condenando enérgicamente estos hechos, que han causado importantes daños a unas instalaciones destinadas al uso y disfrute de todos los ciudadanos, y que han sido recientemente inauguradas”.

Fuentes del Consistorio ha querido “expresar su más profundo agradecimiento a la Policía Científica por la labor realizada en la investigación de este caso, que ha permitido identificar y detener a los presuntos responsables de estos actos delictivos”.

“Estos actos de vandalismo no deben quedar impunes. El Ayuntamiento considera esencial que se haga todo lo posible para que los responsables asuman las consecuencias de sus acciones, no solo por el daño material ocasionado, sino también por el impacto negativo que generan en la convivencia ciudadana. En este sentido, deseamos que este caso sirva de escarmiento para quienes pretendan atentar contra los bienes públicos”, han señalado.

Agentes de Policía Judicial de la Comisaría Local de Aranda de Duero (Burgos) detuvieron a 13 jóvenes, en su mayoría menores de edad, como presuntos autores de los daños en los baños del recinto ferial ‘El Picón’, recientemente inaugurados con motivo del Festival Sonorama Ribera y perteneciente a las infraestructuras pertenecientes al Ayuntamiento de esta localidad.

A mediados de este mes de septiembre, responsables del Ayuntamiento de Aranda de Duero denunciaron a la Policía Nacional unos daños en los baños públicos del recinto ferial ‘El Picón’. Estos hechos tuvieron gran alarma social entre los arandinos, ante la gravedad de los destrozos, con paredes tiradas a patadas, lavabos por el suelo, muchas tapas (de los urinarios) rotas, así como grafitis por todas las paredes. Los daños fueron valorados por encima de los 10.000 euros por peritos del Ayuntamiento.

Las diligencias practicadas se iniciaron con una minuciosa inspección ocular por parte de los agentes de Policía Científica de la Comisaría de Policía Nacional de Aranda de Duero, e incluyen el rastreo de perfiles en Internet y redes sociales, así como numerosas declaraciones policiales. La investigación, que no descarta la implicación de más personas, concluyó con la detención de trece individuos, en su mayoría menores de edad. El correspondiente atestado policial fue remitido a la autoridad judicial competente, según informaron hoy fuentes de la Subdelegación del Gobierno.