Religión
La Archidiócesis de Valladolid destinará la recaudación íntegra del Día de la Iglesia Diocesana a las víctimas del temporal
Argüello advierte que el Estado y el tejido empresarial por sí solos no pueden dar respuesta completa a la catástrofe y asegura que también se requiere una sociedad con el “don” de la vocación de servicio
La Archidiócesis de Valladolid destinará la recaudación integra del próximo domingo, 10 de noviembre, Día de la Iglesia Diocesana, a las víctimas del temporal que ha asolado numerosas localidades valencianas, según confirmó hoy el arzobispo, Luis Argüello, que explicó que todos los fondos será enviados directamente para la diócesis valenciana, para que desde allí sean puestos a disposición de Cáritas o se dediquen para reparar los daños que han sufrido los templos de la zona.
Argüello, que anunció que esta aportación no será la única que realice la diócesis vallisoletana, también advirtió que el Estado y el tejido empresarial por si solos no pueden dar una respuesta completa a la catástrofe y apuntó que “es preciso también contar con una sociedad del don, una economía del don y una política del don, es decir una sociedad, una economía y una política protagonizadas por personas que vivan con vocación de servicio a los demás y con clave de entrega de la vida”, aseguró.
El Día de la Iglesia Diocesana, que este año se celebra bajo el lema: ‘Una llamada que cambia vidas’, es también una jornada para avivar las conciencias sobre la importancia de la corresponsabilidad de todos los fieles en el sostenimiento de la Iglesia. En este sentido, Argüello argumentó que la Iglesia necesita ayuda económica para realizar toda su misión, conservar los templos y pagar a sus colaboradores profesionales pero, sobre todo, precisa de hombres y mujeres que “respondan a la llamada del Señor, una llamada que cambia vidas”.
Durante la presentación del Día de la Iglesia Diocesana también se presentó el balance económico y de actividades de la diócesis vallisoletana, que el pasado año alcanzó un presupuesto de más de 23,8 millones de euros. En la partida de ingresos destacan los 6,39 millones de euros procedentes de las aportaciones de los fieles, el 28,8 por ciento del total, a través de colectas y suscripciones, así como los 4,3 millones de la asignación tributaria, fondos que, según explicó Argüello, son aportaciones indirectas de los fondos.
En el capítulo de gastos la principal partida, de casi ocho millones de euros, está destinada a la conservación y mantenimiento de edificios, mientras que la retribución del personal seglar suma 4,8 millones de euros y la del clero 2,6 millones.
En relación con la conservación de templos, Argüello agradeció la colaboración de las instituciones públicas, en especial de la Junta de Castilla y León, de la Diputación de Valladolid, con la que mantiene un convenio para el arreglo de templos y ermitas que no tienen la condición de BIC, así como a los numerosos municipios que colaboran con las parroquias en estas tareas.
Más desgravación a los donativos
Por último, el ecónomo de la archidiócesis vallisoletana, José María Conde, además de destacar que cada vez son más las personas que realizan donativos a la Iglesia a través de suscripciones, mecanismo que permite poder realizar presupuestos, también resaltó que gracias a la entrada en vigor de la nueva Ley de Mecenazgo, se ha incrementado hasta el 80 por ciento la deducción de los donativos de hasta 250 euros. Por último, también recordó que a través de la página www.donoamiiglesia.es se pueden realizar donativos directos a cualquier parroquia de España.
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