Aragón es una tierra llena de historia, naturaleza, buena gastronomía y también de toponimia peculiar. Muchos de sus pueblos tienen nombres que, si bien para los aragoneses son comunes, para quienes los escuchan por primera vez resultan llamativos, o incluso graciosos. Fuera de aquellos nombres que provienen del aragonés y extraños solo por desconocer la lengua, Aragón tiene localidades cuya toponimia se sale completamente del molde.

Desde términos relacionados con la gastronomía, referencias anatómicas hasta nombres que evocan literalmente sentimientos –véase el caso de Tristeza en Huesca–, los pueblos de Aragón tienen una riqueza lingüística que no deja indiferente a nadie.

1. Gallocanta (Zaragoza)

Famoso por su impresionante laguna, este pueblo, ubicado en la comarca del Campo de Daroca, resalta en Aragón. Aunque su nombre haga alusión a los gallos, lo cierto es que este humedal es conocido por ser un punto de encuentro para miles de grullas en su migración. La laguna de Gallocanta es una de las más importantes de Europa para la observación de aves, lo que le otorga un valor ecológico incomparable.

2. Pancrudo (Teruel)

Este pueblo turolense debe su nombre al río que pasa por la localidad. Uno de sus encantos es un antiguo horno de pan rehabilitado como sala de exposiciones. Se encuentra al noreste de la comarca de Jiloca, en una zona montañosa, aproximadamente a unos 60 kilómetros al norte de la ciudad de Teruel, capital de la provincia, y se accede a ella a través de carreteras locales que conectan con otras localidades de la región.

3. Triste (Huesca)

Triste es una pequeña localidad situada en la provincia de Huesca. Se encuentra en la comarca del Alto Gállego, muy cerca del embalse de La Peña y a unos 35 kilómetros al noroeste de Huesca capital. A pesar de su nombre, que evoca melancolía, Triste es un lugar precioso rodeado de paisajes naturales hermosos, con montañas, valles y ríos. También es un lugar acogedor con apenas 17 habitantes, y se hizo famoso por una campaña publicitaria de helados llevada acabo en 2013 por la marca de helados Frigo.

4. Fiscal (Huesca)

En el Pirineo oscense, encontramos un pueblo cuyo nombre seguro haría sonreír al Ministro de Hacienda. Este hermoso pueblo se encuentra en una de las zonas más bellas del Pirineo, cerca del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Un lugar que, lejos de ser tan agobiante como la Agencia Tributaria, ofrece tranquilidad y paisajes espectaculares.

5. Botarrita (Zaragoza)

Este pequeño pueblo cobró notoriedad cuando la exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá, decidió posar junto a su cartel durante una campaña electoral, utilizando el juego de palabras con su propio nombre. A raíz de este episodio, Botorrita ha pasado a formar parte de esas localidades que muchos recuerdan por la asociación.

6. Bailo (Huesca)

Este pueblo, ubicado en Jacetania, cuenta con tan solo 279 habitantes según el INE. El pueblo cuenta con un entorno natural espectacular, rodeado de montañas que invitan al senderismo y la exploración. Si bien el origen de su nombre aún se desconoce, Bailo ofrece a quienes lo visitan la oportunidad de desconectar de la vida urbana y disfrutar de la tranquilidad y la belleza del Pirineo aragonés.

7. Guasa (Huesca)

Guasa es una pequeña localidad perteneciente al municipio de Sabiñánigo, en la provincia de Huesca, Aragón. Se encuentra en la comarca del Alto Gállego, a pocos kilómetros de la propia Sabiñánigo y en plena ruta hacia los Pirineos. Su nombre en español coloquialmente significa "broma" o "chiste".

El nombre del pueblo ha provocado muchas sonrisas entre los visitantes, quienes lo ven como una curiosidad, especialmente al compararlo con otras localidades cercanas como Triste. Aparte de su nombre peculiar, Guasa ofrece a sus visitantes un entorno natural impresionante, con vistas a las montañas pirenaicas y acceso a numerosas rutas de senderismo.