Violencia callejera
Difunden en redes sociales una "feria" de Kaláshnikov en las Tres Mil Viviendas de Sevilla
Hacen circular vídeos que asustan, con estremecedoras imágenes de disparos, explosiones y armas de repetición
La barriada de las Tres Mil Viviendas de Sevilla es una territorio prohibido. A veces, incluso para las Fuerzas de Seguridad. Se trata de uno de los barrios más peligrosos de España. Es una especie de ciudad sin ley en la que la pobreza se mezcla con la delincuencia y el miedo. Una zona de la capital de Andalucía en la que corren peligro los autobuses a plena luz del día y en la que hay pocas noches tranquilas.
En las últimas horas han empezado a circular vídeos por las redes sociales que asustan. Estremecedoras imágenes de disparos, explosiones y armas automáticas de repetición. En uno de ellos, una voz masculina empieza a describir la situación vivida la noche del sábado y se refiere a uno de los clanes, "los naranjeros", y cuando redirige la cámara con la que graba a otro punto señala la zona de "los caracoleros".
Todo ello entre sonidos de disparos y flashes de luz. "Eso es un rifle, mira", dice. "Escucha metralletas, Dani", continúa diciendo hasta que el miedo de la situación invita a cerrar las ventanas desde las que toma las imágenes. "Illo, eso ya no es normal, hermano. Eso son ya AK47", asegura cuando vuelan ráfagas por el cielo. Estos vecinos, acostumbrados ya a hechos similares, se refieren a la situación como una "Feria".
Desde la red X, el perfil @Cuerpospolicia1 señala: "3000 viviendas en Sevilla, Gobierno ata a los Gatos para que los ratones sigan a lo suyo".
En Tik-Tok otro usuario ironiza con la secuencia del vídeo: "Siguen los combates en Gaza, los palestinos se aferran a sus posiciones y las defienden hasta la última bala.. que no, joé, que es broma, son chavalotes de las 3000 probando sus kaláshnikov, antes de que los gachones racistas los encarcelen injustamente".
La Policía Nacional recibió numerosas llamadas ante la dantesca situación. Varias dotaciones se desplazaron al lugar de los hechos, lo que provocó que la estampida y el fin del tiroteo, en el que se dispararon decenas de proyectiles.
Los policías localizaron varios impactos de bala en vehículos aparcados y en una vivienda. Allí se encontró también un piso en el que se intervino al menos un arma y munición de la misma. La investigación sigue abierta para tratar de detener a los autores de los disparos.
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