Turismo

Este pueblo es el mayor productor de aceite de oliva del mundo y tiene detrás una gran historia

Conocido como la "cuna del olivar", los romanos poblaron estas tierras hace unos cinco mil años aprovechando su abundante caudal de agua subterránea

Su caso histórico esta declarado Bien de Interés Turístico
Su caso histórico esta declarado Bien de Interés Turístico La Razón

Martos es una de las ciudades más singulares de la Sierra Sur de Jaén y el destino ideal para pasar varios días. Elementos naturales y patrimoniales coexisten en un ambiente marcado por la riqueza cultural y tradicional que conquista a sus visitantes. La combinación de todo ello hace que sea reconocida como una de las ciudades más bonitas de la provincia.

Debido a la calidad y la gran cantidad de aceite de oliva que se produce en la ciudad, Martos es denominada habitualmente la «Cuna del olivar», y es considerada el primer productor de aceite de oliva del mundo, teniendo incluso una variedad propia de aceituna (marteña).

Pero Martos no es solo famosa por ser la "cuna del olivar". Martos es una pequeña ciudad mucho más antigua de lo que se piensa. Se tiene constancia de la existencia de asentamientos humanos que poblaron estas tierras hace unos cinco mil años, aprovechando el abundante caudal de agua subterránea que hay en estos parajes y que emerge a la superficie en forma de pequeños manantiales. Esto ha permitido que los pueblos de la Comarca de la Sierra Sur de Jaén desarrollen una actividad agrícola fundamental para el desarrollo de la historia de Andalucía.

Martos es una importante ciudad que se asienta al pie del Cerro de la Peña, coronado por los restos del Castillo del mismo nombre, a lo largo de cuya ladera se extiende el compacto núcleo urbano, presidido por el Castillo de la Villa y por la gran Iglesia de Santa Marí­a. Desde esta privilegiada situación se divisan sus tierras pobladas de un inmenso mar de olivos.

En el interior se encuentran monumentos interesantes como la Iglesia de Santa Marí­a de la Villa, la Iglesia de las Trinitarias, la de San Francisco, la Ermita de San Bartolomé, la Iglesia de San Amador y Santa Ana, el Pilar de la Fuente Nueva, el Hospital de San Juan de Dios, la Real Iglesia Parroquial de Santa Marta, la Capilla de Nuestro Padre Jesús y la Antigua Cárcel y Cabildo.

Para poner en valor este gran patrimonio, la Universidad de Jaén llevará a cabo labores de investigación con el objetivo de profundizar en su pasado ibérico y romano de Martos (Jaén). Estas acciones se materializarán a través de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Martos y el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA.

Según se ha informado desde el Ayuntamiento de Martos, las dos instituciones sumarán esfuerzos para poner en marcha un proyecto que tiene como fin último la puesta en valor del patrimonio arqueológico de Martos.

Se pretende que la rúbrica se produzca al comenzar el próximo año y que inmediatamente después comiencen los trabajos. La iniciativa se enmarca en un proyecto de investigación sobre las colonias romanas de la provincia de Jaén financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.

En concreto, el proyecto de colaboración tendrá cuatro ejes como son la revisión de los estudios bibliográficos; los trabajos de prospección con georradar, vuelos con drones y gps; los estudios de análisis polínicos, restos de fauna, estudios de geología, de la implantación del imperio romano en la colonia; y las publicaciones finales.

Por otro lado, también se han planteado, cuando ya esté todo más avanzado, actividades extraescolares con centro educativos, asociaciones y colectivos, además de voluntariados arqueológicos y la inclusión de Martos en el programa de la ruta bética romana, con la promoción turística que conlleva.

El proyecto de tres años de duración, titulado 'Arqueología multiescalar del imperialismo romano en el Alto Guadalquivir a través del fenómeno colonial (PostColonial_ID)' está liderado por el investigador postdoctoral Mario Gutiérrez Rodríguez (IAI, UJA) y aglutina a 16 investigadores.

El objetivo principal del proyecto es el estudio diacrónico del final del mundo ibérico y la creación de la colonia romana mediante técnicas avanzadas de investigación interdisciplinar a caballo entre la arqueología, la topografía, la geología, la paleobotánica y la antropología física.

Estas investigaciones permitirán conocer el urbanismo de la ciudad antigua, su evolución en el tiempo, las condiciones de salud y enfermedad de sus habitantes, o el paisaje vegetal durante los períodos ibérico y romano, entre otros aspectos.