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Responsabilidad Social

El desperdicio de alimentos, un reto mayúsculo

La asociación Reto a la Esperanza de Sevilla recibe diariamente de Mercadona los alimentos que no se han vendido al público

Rosa, trabajadora de Mercadona, ayuda a Jesús y Pedro a cargar las cajas de alimentos Kiko Hurtado

Atajar la pérdida y el desperdicio de alimentos es una de las metas marcadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030. Una acción que requiere de la acción global de los diferentes actores implicados, desde la sociedad civil, hasta las empresas y los gobiernos. No es para menos, teniendo en cuenta que cada año se tiran 1,2 millones de toneladas de comida solo en España. Para hacer frente a esta mala práctica, que conlleva un elevado coste ético, medioambiental y económico, esta en trámite la ley contra el desperdicio alimentario, que, entre otras medidas, obliga a las cadenas de supermercados a firmar convenios de colaboración con entidades sociales para dar salida a su excedente de alimentos. No obstante, Mercadona trabaja con estas organizaciones desde 2013 donándole sus excedentes.

Al Mercadona de la avenida Parsi de Sevilla llega puntual cada mañana, a eso de las 10.30, Jesús Beltrán, el director de la asociación Reto a la Esperanza, para recoger bolsas cargadas de comida. Esta ONG ayuda a personas drogodependientes a buscar salida en sus centros de acogida inmediata y presta asistencia en la actualidad a unas cien personas, de manera gratuita y desinteresada. La asociación Reto a la Esperanza cuenta con diferentes proyectos para recaudar fondos –venta de ropa y muebles, mudanzas, gestión de residuos...–, pero necesita también de ayuda externa para garantizar una calidad de vida digna a sus usuarios. Porque, en muchas ocasiones, como explica el director de la asociación, «llegan con lo puesto» y con la «vida totalmente rota». Por sus instalaciones han pasado más de 5.300 personas y más del 60% ha completado con éxito el programa de deshabituación.

Debido a su trayectoria desde 1990, ampliamente contrastada, Reto es una de las entidades sociales elegidas por Mercadona para su proyecto de donación diaria de productos no vendidos y que son perfectamente aptos para el consumo. Actualmente, Mercadona colabora con más de 750 entidades sociales de España y Portugal, de las que 219 son de Andalucía.

Las cocinas de la asociación Reto a la Esperanza alimentan a más de 100 usuariosKiko Hurtado

Adicionalmente, imparte formación a la plantilla para concienciar de la importancia de integrar en su trabajo rutinario dichas donaciones. Entre enero y junio de 2024, Mercadona entregó 2,95 millones de kilos a 219 entidades sociales de Andalucía.

Cada mañana, Jesús Beltrán se monta junto con su ayudante Pedro en una furgoneta con cámara frigorífica para recoger las bolsas que les donan cinco supermercados Mercadona de la provincia de Sevilla , con especial cuidado para que lleguen en perfecto estado hasta las cocinas de la asociación Reto. Fruta, pan, yogures, galletas.... los supermercados Mercadona donan todo el excedente apto para el consumo que cumpla todos los criterios de calidad marcados por la empresa.

La cocina de Reto se nutre de productos de MercadonaKiko Hurtado

Además, Mercadona tiene otras estrategias para reducir el desperdicio alimentario. Por un lado, incentiva el consumo responsable, animando a comprar solo lo necesario e implementando su política SPB (siempre precios bajos) para no aplicar ofertas ni promociones. Asimismo, para evitar la generación de excedentes, diariamente, Mercadona hace pedidos a los proveedores y da servicio a tienda para ajustar las existencias a la previsión de ventas de sus supermercados. Otra de sus estrategias es incentivar la venta de productos con fecha de caducidad próxima, principalmente en las secciones de perecederos, mediante el ajuste de precios. Y, por último, entrega los productos que ya no son aptos para el consumo a gestores autorizados que los transforman en comida para animales, abono o energía.