Un nuevo pulso para el centro histórico de El Puerto

Pasear por El Puerto de Santa María, por calles y plazas que, desde tiempos inmemoriales, acuden al encuentro del río Guadalete o la mar que tanto inspiró a su poeta más universal (Rafael Alberti), sigue siendo uno de los grandes lujos de un territorio que se antoja imprescindible para explicar la historia de esa España de las conquistas, el comercio con «las Américas» o las libertades.

Historia, como todas, impregnada de luces y sombras que, de forma muy especial, se han reflejado en su rico casco histórico; en su pulso cultural, social, arquitectónico… vital. Pálpito que se ha propuesto recuperar, revitalizar el equipo de gobierno que lidera el popular Germán Beardo a través de un proyecto de transformación en el que convergen la conservación patrimonial y la innovación urbana.

Proceso que, como era obligado, ha tenido su génesis en la aprobación de un documento fundamental, el Peprichye, y la puesta en marcha de la Comisión Local del Casco Histórico, garantes de un desarrollo urbano (está permitiendo llevar a cabo más de 50 proyectos con agilidad) que se viene tejiendo desde el respeto a la extraordinaria riqueza patrimonial de la ciudad.

Ejemplo de ello es la actuación (una de las llamadas estratégicas) que se ha desarrollado en uno de los grandes escenarios de El Puerto de Santa María, el Guadalete. Bajo el paraguas de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI) y con la cofinanciación del programa FEDER (la inversión total ha ascendido a tres millones y medio de euros), su margen derecha ha experimentado una gran transformación.

Espacios interpretativos y áreas recreativas, con un diseño urbano amigable y accesible, han dado forma al nuevo perfil del río, al que se ha sumado una nueva pasarela y, en breve, se unirán otra más y un puente de tráfico rodado que unirá Valdelagrana con el centro.

«Tierra adentro», su casco histórico también asiste a este proceso de transformación. En esta ocasión, la «herramienta» es el llamado «itinerario amable», «actuación», destaca el Gobierno portuense, «destinada a mejorar la movilidad peatonal y redescubrir el patrimonio histórico en un entorno cómodo y accesible».

Con una inversión de 1,2 millones de euros, este proyecto abarca la remodelación de casi una decena de calles del centro histórico, donde ahora se priorizan los espacios para el peatón.

A través de este trayecto, los visitantes pueden disfrutar de joyas como el Castillo de San Marcos, el Teatro Municipal Pedro Muñoz Seca y el Museo de Cargadores. Espacios que, además de su valor histórico, están perfectamente integrados en la vida cotidiana de la ciudad.

Una ciudad para todos

En este camino de búsqueda de ese nuevo El Puerto de Santa María al que, en más de una ocasión, se ha referido su alcalde, la promoción de la vivienda, en especial la pública, se ha convertido en una de las grandes prioridades del Gobierno portuense. Algo que, además de tildar de “fundamental” para dar respuesta a las necesidades de esos ciudadanos con menos recursos, lo considera fundamental para «fomentar un centro histórico habitado».

Con esos objetivos, desde el Ayuntamiento de El Puerto se están impulsando proyectos para ofrecer vivienda accesible, tales como La Pastora, Residencial Campo de Guía y la antigua Bodega de Campbell, que integran viviendas de VPO, además de espacios de uso público.

En la misma línea, la empresa municipal Suvipuerto está jugando un rol fundamental en la rehabilitación del parque habitacional de viviendas públicas, con el anuncio de más de 6 millones de euros para la compra y rehabilitación de viviendas en el centro, Inmuebles que se pondrán a disposición de los portuenses en formato VPO, con precios asequibles para rentas medias.

«Otros proyectos, como la reforma integral de Santa Clara y otras ubicaciones», subraya, «demuestran la importancia de mantener y mejorar las viviendas ya existentes, garantizando la accesibilidad con un programa de alquileres asequibles, que facilitará la residencia en el centro, especialmente para los jóvenes».

La mirada más singular

De profundas raíces culturales, este nuevo El Puerto también está apostando por nuevos atractivos, cargados de esa intención de contar al portuense y al visitante su extraordinaria singularidad.

El Centro de Interpretación de los Cargadores a Indias (experiencia inmersiva que permite al visitante trasladarse a una casa de cargadores del siglo XVII, decorada con una autenticidad excepcional), el Gran Museo de la Historia (epicentro cultural y arqueológico de primer nivel) o los futuros Museo Cofrade y del Vino hablan de una ciudad decidida a compartir su rico pasado, presente y futuro.

Futuro al que no es ajeno el turismo, que, de la mano de ese proceso de transformación, se está revitalizando a través de una oferta hotelera que busca responder a las demandas de un visitante que ya mira al destino más allá de la temporada de verano.

Ejemplo de ello son los hoteles boutique de las calles La Palma y Luna, establecimientos de 25 y 60 habitaciones, respectivamente, que conjugan elegancia y autenticidad y proponen experiencias singulares en el mismo centro histórico.