Política
La alternativa a Espadas en Andalucía se fraguará tras el Congreso Federal del PSOE
Los críticos aguardarán a la proclamación de Pedro Sánchez en Sevilla para plantar cara al secretario general de los socialistas andaluces
La oposición interna a Espadas ya es como los ríos secretos de la Antártida. Bajo la superficie de las placas heladas de agua subyacen lagos subglaciales que, según la ciencia, pueden estar conectados por un complejo sistema de túneles debajo del hielo, conformando unos ríos nunca antes detectados y que llevan el líquido elemento por debajo de la superficie del continente blanco. Los opositores a Espadas ya van más allá de los grupúsculos independientes y «outsiders» de Bases Andaluzas Socialistas o Reconstruyendo PSOE-A. Primero, se han ido sumando provincias: los últimos exsecretarios provinciales de Córdoba pidieron junto a alcaldes y exalcaldes un «nuevo liderazgo» y el secretario general del PSOE de Cádiz, Juan Carlos Ruiz Boix, reclamó «una reflexión profunda». El diputado onubense Mario Jiménez aplaudió ambos movimientos y la dirección regional le acusó de estar en «un proyecto personal». Ahora, el exportavoz en el Parlamento y ex senador José Caballos –histórico socialista acostumbrado a no dar puntada sin hilo y que ya anticipó el relevo de Susana Díaz también con otro artículo– junto a casi medio centenar de firmas piden «una nueva dirección» para el PSOE-A. A una semana vista para el Congreso del PSOE en Sevilla, los críticos aguardarán a que pase el cónclave, a mayor gloria de Pedro Sánchez, para mover ficha. La alternativa a Espadas se fraguará tras la cita federal y con el objetivo puesto en el posterior regional con fecha límite del 23 de febrero.
Casi 50 firmas suscribieron un artículo titulado «Andalucía y el socialismo andaluz», publicado en el Grupo Joly, reclamando «un nuevo rumbo y una nueva dirección» del PSOE de Andalucía. Además de Caballos, firman tres expresidentes de la Diputación de Málaga –Juan Fraile, Salvador Pendón y José María Ruiz Povedano–, el que fuese presidente de la Diputación de Sevilla y secretario general del PSOE en esta provincia Luis Navarrete, y el teniente de alcalde en el Ayuntamiento de Sevilla durante los mandatos de Espadas y Antonio Muñoz, Juan Manuel Flores.
Los firmantes, según pudo saber LA RAZÓN, a días del Congreso Federal no insistirán en una exposición de motivos que consideran «suficientemente clara». Tras el Congreso Federal la oposición a Espadas hará nuevos movimientos. El artículo recuerda los resultados del PSOE-A en las dos últimas elecciones andaluzas y destaca el «ciclo tan negativo» tras quedar fuera de la Junta por primera vez en la historia de la autonomía en enero de 2019. «Sobran diatribas inútiles en torno a quién, y en qué medida, atribuir responsabilidades por los peores resultados del socialismo andaluz en cuatro décadas», sostienen los autores, que subrayan que, tras la derrota en los comicios andaluces de 2022, «el que fue estandarte del socialismo español –el PSOE-A– sumó otras tres en dos años». «Lo que corresponde ahora, antes de caer en el absurdo continuismo de un presente que ni recuerda ni espera, es apostar por un nuevo rumbo y una nueva dirección del PSOE de Andalucía que, sobre la base de una militancia reactivada y participativa en un partido fuerte, levante las expectativas de la mayoría social progresista, que nos está esperando», recalcan los firmantes. «Pocos compañeros conocen la política andaluza y el PSOE-A como Pepe Caballos», se apresuró a tuitear Mario Jiménez. El presidente del PSOE-A, Manuel Pezzi, criticó que quienes «no supieron mantener» la Junta pidan renovar la dirección «tras solo tres años». Pezzi, que fue uno de los firmantes del artículo pidiendo la sucesión de Susana Díaz, dice ahora que «levantar una gran oposición en tres años no es baladí y se merece continuidad en un trabajo bien hecho». Los firmantes sí avanzan que van a «apoyar a Pedro Sánchez» como secretario general del PSOE en el próximo Congreso «por su coraje, determinación, y por sus políticas progresistas que están beneficiando a muchos millones de españoles» y «por haber mantenido, contra viento y marea y contra todo pronóstico, la Presidencia del Gobierno con casi cuatro puntos y 900.000 votos más que en 2019».
El artículo concluye señalando que «el socialismo democrático andaluz volverá a ser, si se lo propone y se une en torno a un nuevo proyecto para la Andalucía del siglo XXI, la casa común de la izquierda y el gran partido de los andaluces». Recientemente, la ex presidenta Susana Díaz señaló que en Andalucía hay «muchos mimbres, gente de todas las edades, trayectorias, militantes de base y con experiencia» con las que el PSOE podrá volver a recuperar la Junta.
La segunda ley de la termodinámica señala que un sistema aislado permanece estable o cambia hacia un estado de mayor desorden. Tanto Ferraz como los críticos, cada vez más presentes, son conscientes de que Juanma Moreno cuenta con unos apoyos jamás vistos en Andalucía desde Chaves. No obstante, como pasó en las elecciones del 2D, aún se aferran a un factor inesperado que cambie el devenir político, como pasó con Vox en 2012 o la pandemia después. La olivarera y manijera Jaén y la aún de soslayo Sevilla moverán ficha tras el Federal, lo que marcará un punto de no retorno. «Muchos ratones, pocos agujeros y más ratas que ratones», diagnosticaron desde la calle San Vicente antes de perder la Junta. Por Huelva, meteorológicamente, entra el agua y anuncia las catilinarias Mario Jiménez. Muchos sueldos dependen de la Junta y muchos votos de los salarios, que es el nombre que se daba en Roma al «pecunio» –que diría Susana Díaz– del jornal al pagarse en la especia que mejor conserva los alimentos y más escuece en las heridas, casi tanto como los artículos firmados por estrechos colaboradores.