Historia

Los tres objetos sorprendentes que han hallado tras el incendio de Notre Dame

Tras años de trabajo para estabilizar la estructura, los arqueólogos han descubierto tesoros históricos que habían permanecido ocultos por siglos

Paris (France), 09/12/2024.- The Notre-Dame de Paris cathedral during the first day of its opening for visitors, in Paris, France, 09 December 2024. The Notre Dame de Paris Cathedral reopened with a grand ceremony on 07 December after nearly six years of renovation work following its destruction by a fire on 15 April 2019. (Francia) EFE/EPA/MOHAMMED BADRA
Notre Dame cathedral in Paris opens for visitorsMOHAMMED BADRAAgencia EFE

El incendio que devastó la catedral de Notre Dame en 2019 marcó un antes y un después en la historia de este emblemático edificio. Además, la tragedia abrió inesperadas oportunidades para redescubrir los secretos ocultos de la catedral. Tras años de trabajo para estabilizar la estructura, en 2022 los arqueólogos pudieron iniciar excavaciones en su interior, desvelando tesoros históricos que habían permanecido ocultos por siglos.

Durante más de dos meses, el equipo del Instituto Nacional Francés de Investigación Arqueológica Preventiva (INRAP), dirigido por Christophe Besnier, exploró una sección bajo el crucero de la catedral, apenas el 10% de su superficie total. Entre los 1.035 fragmentos hallados, tres destacan por su valor histórico y cultural.

Uno de los descubrimientos más emocionantes fue una serie de fragmentos escultóricos de piedra caliza, que alguna vez formaron parte del coro alto de Notre Dame. Este divisor de unos 4 metros de altura separaba el coro del resto de la catedral en el siglo XIII, pero fue desmantelado en el siglo XVIII bajo el reinado de Luis XIV, quedando sus restos en el olvido durante más de 300 años.

Entre los fragmentos hallados destaca una cabeza de Jesús, descrita por Besnier como "excepcional en su detalle y finura". Estas piezas reflejan la transformación estética que la catedral experimentó con el tiempo. Algunas de estas esculturas ya han sido expuestas al público en el Museo de Cluny en París.

Fragmentos del coro alto
Fragmentos del coro alto Institut national de recherches archéologiques préventives (Inrap)

Otro hallazgo sorprendente fue un sarcófago de plomo que contenía los restos de Antoine de la Porte, un popular sacerdote fallecido en 1710. Aunque más de 400 personas han sido enterradas en Notre Dame, la ubicación exacta de muchas tumbas era desconocida.

El sarcófago presentaba una grieta que permitió a los arqueólogos insertar una cámara endoscópica, revelando detalles fascinantes: piezas de tela, cabello e incluso una almohada de hojas sobre la cabeza, una práctica común en los entierros de líderes religiosos de la época. Posteriormente, análisis más avanzados en el Hospital Universitario de Toulouse confirmaron la identidad del sacerdote.

Sarcófago Antoine de la Porte
Sarcófago Antoine de la PorteJulien de Rosa

El descubrimiento de la tumba del poeta renacentista Joachim du Bellay, fallecido en el siglo XVI, fue igualmente inesperado. Aunque se sabía que había sido enterrado en la catedral, su ubicación exacta había sido un misterio. El análisis de sus restos reveló evidencia de lesiones por equitación, tuberculosis y meningitis, reflejo de una vida marcada por las dificultades. Los arqueólogos lo apodaron inicialmente 'Le Cavalier' por las señales en su esqueleto que indicaban su experiencia como jinete.

Tumba del poeta Joachim du Bellay
Tumba del poeta Joachim du BellaySarah Meyssonnier

Estos descubrimientos resaltan la profundidad histórica de Notre Dame, un lugar que ha sido testigo de más de 800 años de eventos culturales, religiosos y artísticos.