Voces
Alsina retrata al Gobierno con el caso de Mónica Oltra: "Se alegra de su archivo, pero sigue refiriéndose al asunto del hermano de Ayuso como corrupción"
Resalta la incoherencia de Sánchez al persistir en esta calificación, a pesar de que el caso del hermano de la presidenta madrileña fue archivado por dos fiscalías y no llegó al juzgado
En su programa matutino de radio en Onda Cero, el periodista Carlos Alsina ha analizado este miércoles la reciente sentencia que absuelve a Mónica Oltra, vicepresidenta del gobierno valenciano, de cualquier implicación en el caso de abuso sexual cometido por su esposo contra una menor tutelada.
"Mónica Oltra no cometió delito alguno. Su marido sí, abuso de una menor tutelada. Pero ella, no", ha sentenciado Alsina, refiriéndose a la resolución judicial que exculpa a Oltra de cualquier responsabilidad en los hechos. El periodista destaca que para la jueza, "quien al final juzga", no existían pruebas ni indicios que la vincularan con el delito de ocultamiento, abandono de menores o prevaricación, como se había insinuado durante el proceso.
El conductor de 'Más de Uno', ha subrayado lo interesante de esta sentencia en un contexto político marcado por lo que ha llamado "la fangosfera", donde los partidos utilizan la media verdad, la sospecha y la insinuación envenenada para desacreditar a sus adversarios. "El caso de Oltra evidencia que emitir alegremente sentencias políticas, suplantando el papel de los juzgados, contribuye a la injusticia", afirma.
Alsina también ha hecho hincapié en que las acciones delictivas del cónyuge de una gobernante no deben recaer sobre ella. "Son responsabilidad de él, no de ella por muy pareja suya que sea", recalca.
Ahora, el partido de Oltra, que dimitió hace año y medio al saberse imputada, pregunta quién repara el daño causado y quién paga el precio de su dimisión. "Los adversarios políticos cargaron contra ella agitando primero informaciones de prensa (el clásico "se ha publicado en los periódicos") exigiéndole explicaciones por el abuso que cometió su marido contra una menor tutelada por la administración autonómica (el clásico "tiene que dar explicaciones") y presentando luego la existencia de una denuncia, de un sumario judicial y de una imputación como si fuera la prueba de que algo había".
El periodista contextualizó el caso de Oltra dentro de un panorama político donde las acusaciones públicas suelen preceder a la justicia, recordando el caso de Rita Barberá, exalcaldesa de Valencia, y cómo el partido de Otra, Compromís, exigió su dimisión antes de que la justicia la exonerara. "Oltra pagó el pecado de haber aplicado ella la misma medicina a sus rivales", ha señalado Alsina, destacando la ironía de la situación.
En su opinión, la reciente absolución de Mónica Oltra aviva el debate sobre la responsabilidad y la ética en las acusaciones públicas, señalando que, si bien existen antecedentes de políticos condenados por acusaciones infundadas por sus adversarios que luego resultaron exculpados en los tribunales, es raro ver disculpas por parte de los partidos políticos que los condenaron públicamente. "Mucho menos de partido político que habiendo sufrido la baja de uno de sus dirigentes por una sospecha que se reveló incierta se haya comprometido a no usar la misma táctica inculpatoria contra los dirigentes de los partidos rivales".
Alsina también ha hecho referencia a la falta de coherencia del Gobierno, señalando que, por ejemplo el caso del hermano de Ayuso, que fue archivado por dos fiscalías y no llegó a juicio. Pese a eso, Sánchez continúa refiriéndose a ello como un caso de corrupción. "Se alegra el Gobierno. Dice que respeta las decisiones judiciales. Y se alegra del archivo de la causa. Ocurre que el presidente Sánchez sigue refiriéndose a ese asunto como un caso de corrupción del que hace responsable a Ayuso, que es una forma sutil de llamarla corrupta (no sé si al ministro Puente le parecerá insulto o sarcasmo)", sentenciaba Alsina.