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Viajes

Laponia, un eterno cuento de Navidad

La región de Laponia es más que un lugar en el mapa, pues se trata de un reino encantado en el que vive el espíritu navideño todo el año

Entrada al zoo de Ranua Dreamstime

Según avanza diciembre y se aproximan las fiestas navideñas, a todo viajero amante de la Navidad se le viene a la mente un destino: Laponia, donde la realidad se entrelaza con la fantasía y la magia está presente.

La región de Laponia es más que un lugar en el mapa, es un reino encantado en el que el espíritu navideño existe no solo en Navidad, sino durante todo el año. Hablar de Laponia como destino de viaje en estas fechas es, indisolublemente, hablar sobre su capital, Rovaniemi, ya que se alza como el vibrante corazón de esta tierra mágica. En Rovaniemi se concentra la mayor parte del turismo de Laponia, y es que esta ciudad es un auténtico oasis en medio del inhóspito Ártico. Allí, entre los montes de Ounasvaara y Korkalovaara, confluyen paisajes de extraordinaria belleza, cultura, gastronomía, actividades en plena naturaleza y una atmósfera única creada por cuentos de hadas que garantiza una experiencia inolvidable.

Si bien es cierto que la Navidad es el momento perfecto para conocer Rovaniemi, en esta ciudad el cuento navideño nunca escribe su última página, no en vano es el hogar de Santa Claus. Por esta razón, si prefiere visitarla en otra estación del año, no dude en hacerlo. Demos unas pinceladas al encanto propio de cada época en Rovaniemi.

Por ejemplo, si sueña como muchos viajeros con contemplar sus bellas auroras boreales, ha de saber que entre agosto y abril son los mejores meses para hacerlo. Hasta 200 noches al año este espectáculo lumínico se adueña de la Laponia finlandesa, siendo visibles incluso cerca del centro de Rovaniemi; el Arctic Garden, ubicado detrás del Museo Arktikum es una buena opción, así como la cumbre del monte Ounasvaara, un poco más alejado, pero aún más impresionante por el entorno en el que se encuentra.

Además de auroras boreales, nos vamos a centrar en la gran diversidad de actividades que durante todo el año ofrece Rovaniemi para que, aunque no pueda viajar allí estas Navidades, la incluya en su lista de «viajes obligados». Es un destino imperdible para cualquier viajero.

Durante su temporada de nieve —desde el mes de diciembre a abril— se pueden hacer bonitas rutas en moto de nieve, idílicos paseos en reno, salidas con raquetas de nieve y excursiones en trineos dirigidos por huskies, mientras que en verano, cuando hay 24 horas de luz durante tres meses, son el senderismo, los cruceros en barco por el río o los paseos en canoa y kayak las mejores opciones para disfrutar de la belleza de los paisajes que rodean a Rovaniemi.

Personas en trineos de renos en Finlandia, en Rovaniemi, en una granja de Laponia. Dreamstime

Santa Claus Village

No hay duda de que poder hacer todas estas actividades en el espectacular entorno de la capital lapona hace que viajar hasta allí ya merezca la pena, sin embargo, el principal atractivo, y por el que miles de viajeros se acercan en cualquier momento del año, es para conocer a su habitante más famoso: Santa Claus. Aunque fuera en 2010 cuando Rovaniemi obtuvo la condición de ciudad natal de Papá Noel, su «oficina» lleva imprimiendo la ilusión navideña a pequeños y mayores desde 1985. Su aldea está abierta todos los días del año y se puede llegar fácilmente desde Rovaniemi en autobús.

En la aldea de Santa Claus, no solo es posible conocer a Papá Noel, también se pueden escribir cartas a los seres queridos en Santa Claus' Main Post Office,disfrutar de un paseo en trineo tirado por renos (durante el invierno y la primavera) e incluso conocer la Granja de los Duendes y sus adorables pobladores: ovejas, cabras, conejos, diferentes aves y burros; también se ofrece la posibilidad de montar en poni y pasear con alpacas y renos. No puede faltar tampoco una visita a Snowman World, un espectacular mundo de hielo y nieve con un hotel, bar y restaurante. De estas características es el Artic Snow Hotel & Glass Igloos (abierto desde mediados de diciembre hasta finales de marzo y a menos de media hora de la aldea de Santa Claus), del que destacan sus pequeños y cálidos iglús de cristal para poder ver las auroras boreales desde la cama.

Además de estas maravillosas y divertidas experiencias, no faltan las cafeterías y los restaurantes tanto en Rovaniemi como en la propia aldea de Santa Claus. Hay una gran variedad, pero elija el que elija, desde el más acogedor y tradicional hasta el más moderno, todos ellos le harán sentir el sabor intenso y la identidad del norte.

Zoológico de Ranua

En este punto, queremos animarle a vivir otra bonita experiencia, esta vez en el zoológico de Ranua. Si lo visita en invierno, tenga en cuenta que las temperaturas pueden llegar a treinta grados bajo cero, por lo que hay que ir preparado. De cualquier manera, es una excursión que recomendamos hacer para aprovechar al máximo un viaje a Rovaniemi. En Ranua Wildlife Park conviven 200 animales de 50 especies diferentes, todas ellas autóctonas de la zona.

El zoo está situado en pleno bosque, por lo que ya el mero hecho de pasear por él, envueltos de la naturaleza típica de esta región, es ya una preciosa vivencia. A lo largo del camino, verá animales árticos que conviven en su hábitat natural: osos polares, alces, el búho nival, zorros árticos, etc. Sus sonidos es lo único que rompe la paz y la tranquilidad que envuelve al lugar, una buena manera de despedirse de esta tierra tan especial.

Rovaniemi es un destino con mucho que ver y hacer para todas las edades, un destino único que hace que viajar al Círculo Polar Ártico se convierta en una experiencia que va más allá de lo imaginable. Su eterna atmósfera navideña, sus múltiples actividades para hacer y los sorprendentes paisajes que caracterizan esta joya del norte se combinan para ofrecer una aventura transformadora e inolvidable. ¡Anímese a conocer Laponia y su capital, su magia le inspirará y le acompañará para siempre!