Estreno

No lo llame miedo, llámelo Stephen King

La segunda temporada de «Castle Rock», que estrena hoy Movistar Series, es la penúltima adaptación de un autor adorado por los seriéfilos.

Lizzy Kaplan, la protagonista de «Castle Rock», que encarna a la enfermera de «Misery»
Lizzy Kaplan, la protagonista de «Castle Rock», que encarna a la enfermera de «Misery»larazon

La segunda temporada de «Castle Rock», que estrena hoy Movistar Series, es la penúltima adaptación de un autor adorado por los seriéfilos.

Es un estajanovista de la literatura con más de 60 libros publicados y millones de ejemplares vendidos. Si a eso se añade que los géneros que frecuenta son el terror y el suspense, tenemos a uno de los autores más solicitados por las productoras audiovisuales, que no dudan en ofrecerle un cheque en blanco por los derechos de adaptación de sus novelas. Stephen King garantiza –a priori, otra cosa es que guionistas y directores destrocen sus obras– una publicidad extra a cualquier producción televisiva... Y ya van 27 titulos. Hoy se estrena la segunda temporada de «Castle Rock» en Movistar Series, una serie bendecida por la crítica más allá de que su apellido sea «Stephen King». Protagonizada por Lizzy Kaplan («Master of Sex») y Tim Robbins («Here and Now»), la ficción tiene la audacia de proponer una narración en la que se extraen tramas y situaciones de dos de sus obras más famosas: «Misery» y «El misterio de Salem’s Lot». Así, los espectadores se reencontrarán con la enfermera Annie Wilkes, una psicópata y asesina en serie que secuestra a un escritor herido porque no se resigna a que finalice la saga de su personaje favorito.

En enero, «El visitante»

HBO ya está promocionando «El visitante», la adaptación televisiva de la novela del mismo título de King, cuyos derechos compró la plataforma de «streaming» a los pocos días de que el libro saliese a la venta. Sería una bravuconería propia de elitistas decir que este escritor tan prolífico y con un registro literario tan marcado ya no sorprende. Sí, hay un asesinato, concretamente de un niño, y un sospechoso que, en teoría, tenía una trayectoria inmaculada pero lo que importa no es lo que cuenta sino cómo lo cuenta.

Estos títulos se unen a una lista que inauguró un cineasta con un arco narrativo muy parecido al del autor, Tobe Hooper («La matanza de Texas», 1974), que en 1979 fue el responsable de «El misterio de Salem’s Lot», una de las producciones mejor valoradas. Después llegaron «El resplandor» (1997), una producción que pasó inmediatamente al olvido; «La zona muerta», que se mantuvo en antena durante seis temporadas y fue de las que tuvo más adeptos entre los espectadores, y, entre las más recientes, la miniserie «22.11.63», con James Franco. En ella, un hombre viaja en el tiempo para impedir el magnicidio de Kennedy. Pero quizá la más singular es «Golden Years», la primera ficción que creó King expresamente para la televisión, y que fue recibida tibiamente por la audiencia, tras escribir un capítulo de «Monsters» y de «Más allá de los límites de la realidad», entre otras.