Triunfo de Ponce en su vuelta a Insurgentes

Enrique Ponce reapareció en el Coso de Insurgentes tras dos años de ausencia con una faena rotunda a «Liberador» que le sirvió para cortar dos orejas y abrir la Puerta Grande de la Monumental azteca.

El maestro de Chiva dio una clase magistral para deleite de los aficionados. El toro de Teófilo Gómez exigía lo suyo y Ponce empezó el último tercio por abajo, sometiendo al enemigo y ensenándole a embestir. A partir de ahí, las tandas fueron a más, al igual que el fervor en los tendidos. Tras una estocada ligeramente desprendida consiguió dos orejas. Con el cuarto astado, el más difícil del encierro, estuvo muy torero y profesional. Lo intentó todo, lo liquidó con habilidad y escuchó palmas.

Abrió plaza el rejoneador Emiliano Gamero. Logró una buena actuación, tras arrancar el toreo con la garrocha. Siguió con rejones de castigo y banderillas con quiebros, pero mató de un pinchazo y rejonazo trasero, lo que dejó el premio en saludos desde el tercio.

Juan Pablo Llaguno, en la lidia ordinaria con el toro de la confirmación del doctorado, tuvo una labor torera, solvente, tranquila y firme. Realizó un toreo elegante y con clase, mató de media y tres descabellos. Con el sexto igualmente enseñó momentos elegantes con el capote y la muleta. Mató de una magnífica estocada, obtuvo una leve petición de oreja y recibió saludos.

Juan Pablo Sánchez regaló el sétimo toro de la tarde y tras una buena estocada logró la tan buscada oreja. Antes, al tercer toro, con poco fuerza, a pesar de emplear todas sus armas para intentar sacarle el mayor partido, lo mató pronto y obtuvo silencio. Estuvo mejor con el quinto, en una faena con sello propio, aunque lamentablemente lo mató tras dos intentos y tres descabellos.

En el Coso de Insurgentes de México D.F. (México), se lidiaron un toro de Rancho Seco para rejones, y ocho de Teófilo Gómez (uno de regalo), desiguales de presentación y juego. El rejoneador Emiliano Gamero, saludos; Enrique Ponce, dos orejas y silencio; Juan Pablo Sánchez, silencio, saludos y oreja; Juan Pablo Llaguno, que confirmó alternativa, palmas tras aviso y silencio. Media entrada. Enrique Ponce fue obligado a saludar tras romperse el paseíllo.