Francisco Rivera Ordóñez: «Echaba mucho de menos lo que he sido»

El torero Francisco Rivera Ordóñez «Paquirri» ha explicado esta mañana los pormenores de su vuelta a los ruedos el 8 de marzo en la plaza de Olivenza (Badajoz), cuando se cumplen veinte años de su alternativa, y ha confesado: «Echaba mucho de menos lo que he sido».

«Es un paso muy pensado y meditado, muy comentado en casa tanto con Lourdes -su mujer- como con Cayetana -su hija- y después de poner todo en la balanza me he mirado muy dentro de mí. Echaba mucho de menos torear; es donde he sido feliz y aquí estamos otra vez», ha comentado el matador, que ha ensalzado el escenario de su vuelta a los ruedos, la plaza de Olivenza, y sus compañeros de cartel, Enrique Ponce y Morante de la Puebla.

Rivera ha evocado las circunstancias que alentaron su decisión, espoleada a raíz de un almuerzo con sus nuevos apoderados (José Cutiño y Simón Casas), a los que expuso sus dudas sobre la aceptación que tendría una vuelta a los ruedos. «Les pregunté que si decidía torear, ¿quién iba a contar conmigo en las ferias y en las plazas importantes?», y la respuesta de los empresarios acabó inclinando la balanza.

Ha desvelado que sus planes pasaban por pisar todos los ruedos de relevancia: «Mi deseo es estar en todas las plazas importantes. Voy a Castellón, a Valencia y me gustaría ir a todas las plazas de categoría y terminar en Zaragoza, donde pusimos ese punto y aparte». «Me planteo esta temporada como una celebración de mis veinte años de alternativa, pero también pensando en el peso de mi sangre», ha señalado.

«Espero que los dos años de descanso me hayan dado otra visión del toreo y otro poso. Este invierno hemos estado trabajando ese concepto, limándolo, sin dejar de ser yo. Es una oportunidad de decir cosas en el toro, cosas que a lo mejor no he dicho todavía», ha comentado el diestro poniendo un especial énfasis en agradecer la colaboración y el empeño puesto por sus nuevos apoderados.

Paquirri también se ha referido a la plaza de la Maestranza y ha confesado que le gustaría estar en Sevilla porque «sería ilusionante y un sueño». «Por mí no va a quedar», ha asegurado Rivera, que asume junto con otros toreros veteranos la responsabilidad de soportar gran parte del peso de la programación de la Feria de Abril ante la ausencia de las figuras del momento. Al respecto ha explicado que se trata de «una responsabilidad muy bonita. Tanto Enrique, como el maestro Juan Antonio -en alusión a Espartaco, que reaparece puntualmente en la Feria- saben lo que es esa responsabilidad y la han llevado sobre sus hombros muchas veces». El diestro ha precisado: «Estamos acostumbrados a llevarla y creo que podemos asumirla. Es un reto y una oportunidad».

El matador también ha querido puntualizar que esta reaparición está orientada únicamente a la temporada 2015: «Tengo un pacto con mi mujer y es para sólo un año. Lourdes lo pasó mal al principio pero cuando me vio meterme en el campo y empezó a verme disfrutar comprendió todo».

No ha despejado las dudas sobre su presencia en la tradicional corrida de Ronda, plaza de la que es empresario. Sí estará su hermano Cayetano, primer torero contratado para este evento que se celebra a principios de septiembre, el cual, según su organizador, «aún está abierto a combinaciones casi infinitas». En cualquier caso, ha reconocido, «¿a quién no le haría ilusión torear en Ronda?».

Aunque el calendario de sus actuaciones permanece abierto, el torero también ha desvelado que estaría presente en abril en la feria mexicana de Aguascalientes, organizada por la empresa Espectáculos Taurinos de México que, con los activos que suman sus apoderados, forma la Fusión Internacional por la Tauromaquia.