El Monte Everest ¿crece o decrece? Alba y Jose aciertan y se llevan 50.000 € en "Atrapa un millón"

Antena 3 vivió otra gala apasionante de "Atrapa un millón", uno de los míticos concursos de la cadena presentado por Manel Fuentes, que encumbró anoche a una joven pareja que gracias a su gran memoria y complicidad se llevaron 50.000 € de premio, un buen pellizco para su bolsillo que lo reutilizaran para la entrada de su primer piso. La pregunta que marcó del devenir de su buena suerte estuvo relacionada con la geología y fue aquí cuando José se acordó de la explicación de su profesor de dicha materia y decidió una de las dos opciones que proponía el programa: el monte Everest, ¿crece o decrece?

La lógica también ayuda

Alba y Jose llegaron a la última pregunta de "Atrapa un millón" con 50.000 euros en juego. La pregunta decisiva planteaba una duda sobre el Monte Everest: ¿crece o decrece debido al movimiento de las placas tectónicas? Jose, confiado en su conocimiento de geología, apostó sin dudar a que la montaña crece, recordando las enseñanzas de su antiguo profesor. Aunque Alba dudó al principio, confió en su pareja. La tensión se apoderó del plató mientras esperaban el veredicto final, conscientes de que el dinero podría servirles para la entrada de su futuro hogar si acertaban esa última y crucial respuesta.

Tras una espera que pareció interminable, Manel Fuentes confirmó la respuesta correcta: el Monte Everest crece debido al choque de las placas tectónicas. La alegría fue inmediata, y Alba y Jose celebraron su merecida victoria, llevándose 50.000 euros. Su participación en "Atrapa un millón" demostró su confianza mutua y ahora, gracias a su conocimiento y valentía, podrán cumplir su sueño de independizarse.

La explicación científica

El Monte Everest, la montaña más alta del mundo, continúa creciendo debido al desplazamiento constante de la placa india hacia el norte, a una velocidad de unos 4 centímetros por año. Según datos de "National Geographic", este movimiento genera una elevación anual de aproximadamente un milímetro en el Everest y hasta 10 milímetros en otras partes de la cordillera del Himalaya. Sin embargo, el crecimiento no es uniforme, ya que la presión acumulada por el choque de placas puede liberarse en terremotos, haciendo que la montaña crezca o mengüe levemente, como ocurrió en el seísmo de Nepal en 2015. Además, mientras las rocas emergen hacia el cielo, la erosión causada por el viento y el agua contrarresta este crecimiento. Los sedimentos arrastrados por ríos como el Ganges y el Brahmaputra terminan en el delta que forma Bangladés y Bengala Occidental. Así, el Everest sigue su lento pero constante crecimiento, impulsado por las placas tectónicas y limitado por la erosión natural.