España en Eurovisión: dos victorias y muchas decepciones

El esperado 68º Festival de la Canción de Eurovisión está a punto de llegar a su clímax el próximo sábado por la noche en el Malmö Arena de Suecia. El certamen, que el año pasado vio a Loreen llevarse el codiciado micrófono de cristal, promete una vez más una noche llena de música, espectáculo y, como es habitual, un toque de controversia.

Este año, España presenta a Nebulossa, un grupo cuya canción "Zorra" ha generado un considerable debate desde que debutó en el 'Benidorm Fest'. La letra de la canción ha polarizado opiniones entre políticos, artistas y ciudadanos, abordando una historia en la que la agresión verbal es utilizada por un hombre para someter y denigrar a una mujer, transformando el término "zorra" en una explosión musical que desafía tabúes.

Aunque la canción puede no ser del agrado de todos, las casas de apuestas, como en la mayoría de las ocasiones, colocan a España lejos de las posibilidades de ganar el festival. De hecho, España solo ha ganado en dos ocasiones en toda su historia en Eurovisión: en 1968 con "La, la, la" de Massiel y en 1969 con "Vivo cantando" de Salomé. Desde entonces, han pasado 54 largos años sin volver a alcanzar la victoria, convirtiendo a España en el país participante con el mayor tiempo transcurrido desde su última victoria.

A pesar de contar con artistas de renombre como Raphael, Julio Iglesias, Mocedades, Rosa López, Pastora Soler y Blas Cantó, entre otros, tener una carrera exitosa no garantiza el éxito en Eurovisión. Hechos recientes lo demuestran. En los últimos años, la mayoría de los representantes españoles han enfrentado desafíos que les han impedido obtener una buena posición en el concurso. Desde el decepcionante último puesto de Lydia Rodríguez en 1999 hasta la viral actuación de Manel Navarro en 2017, España ha luchado por destacar en Eurovisión. Incluso casos como el de El Sueño de Morfeo en 2013 o Las Ketchup en 2006, que quedaron en posiciones bajas a pesar de su popularidad, subrayan los desafíos que enfrenta España en el concurso.

Sin embargo, España ha dejado su huella en Eurovisión con momentos históricos como el saboteo de la actuación de Daniel Diges por parte de Jimmy Jump en 2010, o la inolvidable presentación de David Fernández como Chikilicuatre en 2008. Y hace apenas dos años, España estuvo cerca de recuperar la gloria con Chanel y su "SloMo", que estableció un récord histórico de puntos para España en Eurovisión y alcanzó el segundo lugar.