Adicciones
¿Trastorno de personalidad?
l El monje shaolín calificó el entrenamiento que recibió de su hermano de «tortura», ¿puede tener esto relación con sus prácticas?
–En este caso, hablamos de una persona con una personalidad llevada al extremo. Podríamos hablar de una psicopatía. Hay muchos tipos de personalidad que, llevadas al límite e influenciadas por factores externos, como el consumo de sustancias, pueden llegar a trastornos graves. Otra posibilidad es que sea un enfermo mental, que padezca algún tipo de esquizofrenia y no se le haya detectado ni tratado. Los esquizofrénicos tienen delerios, es decir, percepciones que no están sujetas a la realidad.
l Se sabe que tenía un tumor cerebral, ¿puede ser está la causa de algún trastorno?
–No, porque no se producen este tipo de alteraciones, aunque depende de la localización del tumor. Hay lóbulos del cerebro que funcionan de freno, como el frontal. En algunos casos, las alteraciones en este lóbulo pueden provocar conductas irrefrenables y, por tanto, pueden poner en marcha sentimientos o acciones que se apartan de la realidad.
l ¿Ante qué tipo de perfil de persona nos encontramos?
–Se trata de una personalidad dominadora que intenta imponer sus creencias, que son muy férreas. Son conductas propias de una secta en la que se intenta que todo el mundo piense igual.
l ¿Puede ser catalogado como un psicópata?
– Sí, una psicopatía no es una enfermedad mental, es un trastorno de personalidad. En muchos juicios, determinar si se trata de un enfermo o de un psicópata es uno de los puntos más importantes. El psicópata es consciente en todo momento de lo que hace, pero los enfermos mentales sufren delirios en los que pierden la percepción de la realidad. El psicópata no tiene sentimiento de empatía ni de culpabilidad, simplemente actúa.