Montevideo
El Papa aprueba la canonización de la española María Isabel Salvat y Romero
El Papa Francisco aprobó hoy el milagro por el que será proclamada santa la religiosa española y ya beata María Isabel Salvat Romero, informó hoy la oficina de prensa del Vaticano. También aprobó las "virtudes heroicas"de la también monja española Rafaela Martínez-Cañavate Ballesteros, con lo que comienza su camino hacia la posible beatificación, informa Efe.
La religiosa que será proclamada santa adoptó el nombre de María Inmaculada Concepción y nació en Madrid el 20 de febrero de 1926 y falleció en Sevilla el 31 de octubre de 1998.
Fue la superiora general de la Congregación de las Hermanas de la Compañía de la Cruz y el 27 de marzo de 2010, Benedicto XVI firmó el decreto que reconocía un milagro atribuido a la intercesión de la religiosa y por el que era declarada beata.
Los decretos fueron firmados ayer en la audiencia que concedió el Papa al prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, al arzobispo Angelo Amato.
Entre ellos también se encuentra el decreto que aprueba las "virtudes heroicas"de la también monja española Rafaela Martínez-Cañavate Ballesteros, que puede así ser declarada "venerable"y proseguir el proceso de beatificación.
La religiosa granadina, que adoptó el nombre de Rafaela María de Jesús, pertenecía a la orden a de las Capuchinas de Santa Clara y nació en Maracena, el 31 de marzo de 1915, y murió en Chauchina, el 29 mayo 1991.
Asimismo, se aprobó el decreto que reconoce las "virtudes heroicas"de Jacinto Vera, quien fue obispo de Montevideo.
Vera, el primer obispo uruguayo, murió el 6 de mayo de 1881 en una posada del pueblo Pan de Azúcar, en uno de sus numerosos viajes misioneros.
Había nacido el 3 de julio de 1813 durante el viaje en el que sus padres, provenientes de las islas Canarias, iban como inmigrantes a Uruguay.
También Francisco firmó hoy los decretos para la canonización, ya anunciada, del beato español Junípero Serra, que falleció en Monterrey, en California, (Estados Unidos) sin que haya necesitado un milagro para esa proclamación.
Así como también los decretos para la canonización del beato italiano Vincenzo Grossi (1845-1917), y el milagro para beatificar al sacerdote italiano Giacomo Abbondo (1720-1788).
También firmó el decreto que reconoce el martirio de los misioneros italianos Mario Borzaga y Paolo Thoj Xyooj, asesinados en Laos en 1960 y que serán así declarados beatos.