El nuevo Real Madrid de Florentino

Con un respaldo abrumador –1790 votos a favor por 7 en contra–, Florentino Pérez definió ante la Asamblea de socios lo que será el nuevo club: un Real Madrid renovado. Con más de mil millones de ingresos, el modelo madridista, «que se estudia en Harvard», evolucionará hacia «la reorganización societaria», asegurando, frente a las tarascadas de sus enemigos, la soberanía de los socios. «Nuestro deporte está herido de gravedad», fue el rejón que el presidente del Madrid clavó en todo lo alto sobre Javier Tebas.

Hombre que se distingue por la moderación, el buen sentido y el equilibrio de juicio, Florentino Pérez está considerado como el mejor presidente de la historia del Real Madrid. Deportivamente ha superado en títulos y éxitos al inolvidado Santiago Bernabéu. Ha construido además el mejor estadio del mundo y ha tenido el señorío de mantener el nombre de Bernabéu, aunque dentro de muchos años, cuando decida dejar la presidencia, los aficionados le llamarán el estadio Florentino.

Por otra parte, en su primera gestión al frente del Real Madrid, demostró su capacidad empresarial, sacó al club de la bancarrota y lo instaló en la prosperidad. Uno de sus sucesores, hombre aspaventoso y tórpido, deformado por la vanidad y la altanería, devastó el club a través de incontables trapisonderías. Los socios clamaron por el regreso de Florentino que, en solo unos meses, resanó la hacienda y limpió la podredumbre acumulada en los albañales madridistas. Lo hizo sin venganzas ni reproches, con el espíritu liberal que siempre caracterizó al actual presidente del Madrid.

Escribo todo esto yo que naturalmente soy, como Dios manda, del Athletic de Bilbao, único equipo de relieve en el que juegan siempre once españoles y que en mi adolescencia exhibió aquella inolvidable delantera de fuego: Iriondo, Venancio, Zarra, Panizo y Gaínza. Zarra, por cierto, mantiene el récord goleador. En la Liga 1946-47 marcó 1,42 goles por partido frente a los 1,26 de Messi y los 1,25 de Ronaldo en sus mejores temporadas. Ricardo Zamora, por otra parte, ha sido con mucha diferencia, según Pedro Escartín, el más destacado futbolista español del siglo XX, seguido por Piru Gaínza. Zamora mantiene el gran récord del fútbol español: 17 años internacional indiscutido. Añadiré que el mejor jugador que yo he visto, en 85 años de asistir a partidos en España, Europa y América, se llama Alfredo Di Stéfano.

Luis María Anson, de la Real Academia Española