Este es el municipio de la Región de Murcia que no tiene cajeros en su casco urbano

Puede parecer impensable para unos, y de otro siglo para otros, pero hoy en día todavía existen zonas en las que las nuevas tecnologías y los sistemas automáticos no están al alcance de todo el mundo. Un buen ejemplo de ello son las zonas rurales, los municipios y pedanías del interior de las provincias y comunidades cuyos vecinos, muchos de ellos personas mayores, tienen que superar obstáculos para adaptarse a la inmediatez de los tiempos.

Uno de los retos a superar por las administraciones públicas para mejorar el desarrollo económico y social de los municipios es la lucha contra la exclusión financiera. Algunas localidades no cuentan con recursos bancarios como lo son los cajeros automáticos, por lo que han de desplazarse a municipios vecinos para ser atendidos por una entidad y desarrollar las operaciones bancarias pertinentes como sacar dinero o pagar recibos.

De hecho, el municipio de Ojós es el único de la Región de Murcia que no dispone de este servicio en su casco urbano, lo que supone todo un desafío para los vecinos, y que potencia aún más la despoblación de dichas zonas rurales a entornos más desarrollados tecnológicamente.

En el marco de esta lucha, el Consejo de Gobierno de la Comunidad aprobó hace unos días una partida de cerca de 600.000 euros para instalar 13 cajeros automáticos y conexión a internet en zonas rurales de la Región. Cuatro serán de Cajamar y otros nueve de Caixabank, y en la dotación de ayudas también se incluirá el mantenimiento de dichos servicios.

Estos nuevos terminales bancarios se situarán tanto en Ojós, como en los municipios de Ulea (donde se prevé la sustitución del cajero existente, totalmente obsoleto), en otras tres pedanías de Caravaca de la Cruz (Navares, Singla y La Encarnación), tres localidades de Cehegín (Canara, Chaparral y Campillo de los Jiménez/ Algezares), dos poblaciones de Lorca (Coy y La Parroquia), dos de Moratalla (Cañada de la Cruz y el Sabinar), y finalmente en la pedanía de La Copa, en el municipio de Bullas.

Beneficiarios y previsión

Según las previsiones de la Consejería de Economía, Hacienda y Administración Pública, estos nuevos cajeros automáticos beneficiarán directamente a los más de 5.000 habitantes que residen en esas zonas poco pobladas.

De hecho, el objetivo de la Comunidad es comenzar a preparar ya las zonas y locales en coordinación con los ayuntamientos para que estén instalados a principios del próximo año. Los consistorios regionales, según se desprende del acuerdo de colaboración, solo tendrán que ceder el espacio para la ubicación de los terminales bancarios, así como proporcionar el suministro eléctrico.

Este acuerdo para la instalación de cajeros automáticos ayudará a paliar el problema de la exclusión financiera, como parte de la estrategia de lucha contra la despoblación y mejora de la calidad de vida en entornos rurales de la Región.