Un gasolinero advierte: este es el fallo al repostar que muchos ignoran en España

En la actualidad, los controles de emisiones en los vehículos son cada vez más estrictos, especialmente en Europa, donde las normativas ambientales han obligado a retirar millones de coches del mercado por no cumplir con los estándares de contaminación. Dichas medidas buscan reducir las emisiones nocivas que afectan la calidad del aire y contribuyen al cambio climático. Sin embargo, muchos conductores desconocen que un simple descuido puede activar el testigo de avería del motor en sus vehículos modernos y actualizados a las normativas ambientales causando posibles visitas al taller.

Uno de los sistemas clave en el control de emisiones es el EVAP (Sistema de Control de Emisiones Evaporativas). Su función es evitar que los vapores de combustible se liberen a la atmósfera, ya que estos gases son altamente contaminantes. Este sistema verifica la presión en el depósito y garantiza que los vapores sean redirigidos y tratados antes de ser liberados. Sin embargo, su correcto funcionamiento depende de un detalle tan simple como cerrar bien el tapón del depósito de combustible después de repostar.

El error más común al repostar y sus consecuencias

En muchos coches modernos, dejar mal cerrado el tapón del combustible puede desencadenar la activación del testigo de avería del motor en el salpicadero. Esto se debe a que el sistema EVAP detecta una fuga en la estanqueidad del depósito, lo que provoca una alerta en la centralita del vehículo. Para el conductor, ver encendido este testigo puede ser motivo de alarma, ya que generalmente se asocia con fallos graves en el motor o en el sistema de emisiones.

Lo primero que se debe hacer si este testigo aparece justo después de repostar es comprobar si el tapón del combustible ha quedado bien cerrado. Un cierre incorrecto permite la fuga de vapores de gasolina, lo que no solo afecta el funcionamiento del EVAP, sino que también puede aumentar las emisiones contaminantes del coche. Afortunadamente, este problema tiene una solución sencilla que no requiere de conocimientos mecánicos ni visitas al taller.

Cómo solucionar el problema en pocos pasos

Si el testigo de avería del motor se enciende después de repostar, lo primero que hay que hacer es apagar el motor y asegurarse de que el tapón del depósito está bien cerrado. Para ello, se deben seguir estos pasos:

• Bajar del coche y abrir la tapa del depósito.
• Revisar que el tapón no esté flojo ni mal ajustado.
• Cerrar el tapón con suavidad, asegurándose de girarlo hasta el final sin forzarlo.
• Encender el motor y verificar si el testigo de avería desaparece.

En la mayoría de los casos, una vez corregido el cierre del tapón, el sistema EVAP detecta la corrección y la alerta desaparece en poco tiempo. Sin embargo, si el testigo sigue encendido tras varios kilómetros, puede ser necesario realizar un reseteo del sistema o acudir a un mecánico para asegurarse de que no hay otro problema en el vehículo.

Este tipo de errores al repostar son más comunes de lo que se piensa y pueden evitarse con un simple hábito: comprobar siempre que el tapón del combustible esté bien cerrado antes de arrancar el coche. Además, este pequeño gesto no solo previene alertas innecesarias en el tablero, sino que también ayuda a reducir la emisión de vapores contaminantes, contribuyendo al cuidado del medio ambiente.