Urbanismo

La Nueva Centralidad del Este: una apuesta en Madrid por la sostenibilidad

Los espacios verdes ocuparán una tercera parte del total de este desarrollo

Nueva Centralidad del Este
Nueva Centralidad del EsteNCE

Un espacio en desarrollo. Y en continuo cambio. Como parte de su apuesta por la innovación, el talento y la sostenibilidad, la Nueva Centralidad del Este (NCE) se convertirá en una referencia de urbanismo del siglo XXI con la simbiosis entre la naturaleza y la tecnología configurando el próximo gran desarrollo urbano de Madrid. Los espacios verdes, que con unos dos millones de metros cuadrados ocuparán un tercio del ámbito, se configuran, junto a los peatones, como los grandes protagonistas de la NCE integrando la naturaleza como eje estructurante del sector y en consonancia con el reconocimiento a Madrid como la Ciudad Arbórea del Mundo 2023, una distinción que mantiene por quinto año consecutivo.

En este sentido, la Nueva Centralidad del Este integra una de las piezas fundamentales del proyecto del Bosque Metropolitano de Madrid de forma que el ámbito es atravesado de Norte a Sur por una gran infraestructura verde que conecta las tres grandes zonas interiores del sector (el espacio natural de las lagunas de Ambroz al Sur, los barrios residenciales centrales y el Campus tecnológico al Norte) con las zonas verdes de los barrios colindantes (el parque Forestal de Vicálvaro…).

A esta gran infraestructura natural se solapa una red secundaria de arterias verdes de uso exclusivo para peatón y bici que conectarán los diferentes elementos emblemáticos de la NCE: las zonas residenciales, las paradas de Metro y transporte público, los puestos de trabajo en el Campus Tecnológico, los ejes de actividad económica y los distintos equipamientos y servicios.

La Nueva Centralidad del Este recupera el concepto de barrio, de la ciudad mixta, viva y compacta, y propone cuatro piezas de en torno a 4.500 viviendas cada una en la que se incluyen de manera equilibrada los espacios de residencia, trabajo, equipamientos, zonas verdes, comercio y ocio reduciendo las distancias para poner al alcance del peatón todos a menos de 15 minutos.

De cara a dotar de vida a los barrios la actividad económica y comercial de proximidad se concentra en un anillo peatonal que conecta las cuatro plazas principales de cada uno de los barrios del sector en las que los espacios verdes y los peatones también serán protagonistas. Estas plazas serán el centro de reunión del barrio y su escala es similar a la de las plazas de Chamberí y la del 2 de Mayo. Al Sur del ámbito se creará un gran espacio natural que permitirá la conservación y restauración de la Laguna de Ambroz y la creación de una segunda laguna situada al Sureste: la laguna Victoria. Con una superficie verde similar a la del Parque del Retiro tendrá un carácter natural y se utilizarán especies autóctonas para reducir el consumo de agua, así como un innovador un sistema integral de gestión y drenaje de las aguas pluviales que recoja y limpie el agua de lluvia para alimentar las lagunas.

Desde allí en dirección Norte se crea un parque lineal, la Avenida Forestal, eje conector de todo el sector y con la red verde exterior metropolitana. En la zona Norte, la trama verde del bosque se prolonga dentro de la ciudad para generar unas zonas intermedias que denominaremos “Campus”. En ellas, los edificios de actividades ligados a la tecnología, los centros de investigación, los equipamientos, etc. se integran en la trama verde como si se tratara de un campus universitario. Continuando con el modelo de campus se incorporan, adosados al Bosque y en continuidad con él, los equipamientos que dan servicio a las zonas residenciales y que a su vez actúan como ampliación del Bosque. Con este innovador planteamiento de ciudad sostenible, la gran infraestructura verde se convierte en el centro de vida en el que confluyen los barrios y que sirve como principal arteria de conexión para el peatón, los ciclistas y los deportistas gracias a los más de 50 kilómetros de carriles para bicis y vehículos eléctricos (patinetes, mega motion…); y otros tantos kilómetros de sendas para runners. La innovación sostenible de la Nueva Centralidad del Este también se plasmará en la edificación de los barrios y hogares sostenibles e inteligentes, incorporando antes de su construcción tecnología, elementos y sensores IoT y Smart Grids (para la automatización, gestión de servicios y control de indicadores de calidad) y promoviendo energías renovables (paneles solares, energía eólica, biogás…), con diseños de edificios que reduzcan el gasto energético y apliquen la economía circular (uso de materiales reciclados o sostenibles, aplicación de nuevas tecnologías inteligentes para facilitar el reciclaje y reducir la generación de residuos…).

El desarrollo de las urbes y la aparición de nuevas megaciudades obligan a pensar en el modelo de ciudad, barrio y vivienda que los habitantes demandan, teniendo en cuenta que el acceso a la vivienda, la contaminación y el tráfico asociado a los núcleos urbanos y la demanda de espacios verdes son algunos de sus problemas recurrentes.

“La Nueva Centralidad del Este es el último gran lienzo en blanco de Madrid, lo que nos obliga a plantear un innovador desarrollo mixto de espacios verdes, viviendas y actividad empresarial llamado a ser una referencia y emblema del Madrid del siglo XXI”, apunta Alfredo Zulueta, presidente de la comisión gestora de la Nueva Centralidad del Este. “Tenemos la oportunidad de diseñar ciudades adaptadas a los nuevos retos y necesidades medioambientales del siglo XXI, que resuelvan los errores cometidos en el pasado, bajo una gestión comprometida con nuestro planeta para contribuir al crecimiento sostenible e impulsar la innovación empresarial y la digitalización de las ciudades, al tiempo que atendemos la creciente demanda de viviendas asequibles, espacios verdes e infraestructuras eficientes e inteligentes”, añade Zulueta.