Desde 2009 la celebración del Madrid Gallery Weekend da por inaugurada la temporada expositiva de galerías de arte en Madrid. Esta tuvo su arranque el pasado día 8, con una extensa programación y horarios excepcionales que ha reunido en la ciudad a artistas, profesionales del sector, coleccionistas, instituciones públicas y privadas, empresas y público nacional e internacional. Algunas de sus actividades se extenderán a lo largo del mes de septiembre y un programa artístico diverso e interesante por los diferentes barrios de la capital.

Entre las actividades se encuentran hasta el próximo 25 de septiembre, las exposiciones de Pipo Hernández y Federico Miró, en el Museo Nacional del Romanticismo y en el Museo Nacional de Artes Decorativas, respectivamente. Con motivo de Apertura Madrid Gallery Weekend también invitan a visitar las librerías de los diferentes barrios como Laire Caixa Forum, Antonio Machado Salesas y Círculo de Bellas Artes, La Central del Museo Reina Sofía y Callao, Librería Gaudí, Pasajes: librería internacional, Taschen y Tipos Infames. En esta última, este martes habrá un encuentro con el artista Jordi Teixidor, Pilar Carrera y Miguel Álvarez Fernández. Desde el miércoles y hasta el próximo sábado, 24 de septiembre, tendrán lugar los ARCO Gallery Walks con las que ARCO y su Fundación impulsan las visitas guiadas gratuitas por las galerías de arte contemporáneo madrileñas. Alfonso de la Torre, guiará dos de estas visitas los días 22 y 29 de septiembre a las obras de Pablo Palazuelo diseñadas para la sede de Bankinter del Paseo de la Castellana 29 y al Museo de Escultura al Aire Libre en el Paseo de la Castellana 40.

Alma y naturaleza

Así, esta décimo tercera edición ha dejado 55 galerías abiertas, 57 exposiciones de cerca de 70 artistas diferentes. La Galería Elvira González ha inaugurado la quinta exposición individual del artista Adolfo Schlosser. El artista austriaco estuvo afincado en Madrid durante las últimas cuatro décadas de su vida y fue su necesidad de expresión la que le impulsó a practicar distintas disciplinas y a utilizar el arte para investigar el vínculo activo entre el alma y la naturaleza. La exposición presenta más de cuarenta obras en las que se analiza la evolución del artista a través de una selección de esculturas, obra sobre papel e instalaciones. La práctica de Schlosser se plantea como la reflexión de un artista que considera la naturaleza como organismo viviente y no como medio; por lo que en sus obras hay una clara referencia a ella desde un punto de vista formal además del uso de materiales como algas, piedras, cera natural, paja y adobe.

«Pinturas» de Cristina Garrido, estará en The Goma hasta el 5 de noviembre. En esta exposición, la madrileña reflexiona sobre las implicaciones ideológicas en el uso del color o su olvido. A través de una serie de intervenciones en una selección de obras de la Historia del Arte reciente, la artista vuelve a profundizar en el legado manual y el valor cultural de ciertas prácticas que devienen académicas. La artista recibió el premio Generación 2015 Proyectos de Arte Fundación Montemadrid y ha sido galardonada con El XV Premio ARCO Comunidad de Madrid para Jóvenes Artistas 2018 y con la Fundación Botín de Becas de Artes Visuales 2017-2018. Su trabajo se ha podido ver en exposiciones en la Fundación DIDAC, Fundación Telefónica, Centro Botín, CASS Sculpture Foundation, el British Museum, entre otros. En 2023 expondrá de forma individual en el Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles.

Hasta el 28 de octubre, la galería Ponce + Robles acogerá «Intestinal Affair» de Día Muñoz. Una artista multidisciplinar interesada en la intersección de la ciencia, la naturaleza y la tecnología. El cuerpo de trabajo que se presenta en esta exposición 3D es una exploración de autorretratos de la salud intestinal y la ecología de la artista después de contraer COVID-19 en octubre de 2020. Los estudios muestran que los pacientes con COVID-19 tenían agotamiento de simbiontes y enriquecimiento de patógenos oportunistas, que son persistentes después de la liquidación de COVID-19. Se estima que el 40 % de la población mundial sufre problemas relacionados con el intestino, lo que crea un agotamiento de la ecología del microbioma en el cuerpo humano. En un estudio realizado a 204 pacientes que habían contraído COVID-19 el 50% había desarrollado problemas intestinales a raíz del virus.

Durante su residencia en Art House, San Clemente (USA), Dia tuvo la oportunidad de vivir con un experto en nutrición y bienestar enfocado en la salud intestinal. Es ahí donde la artista entiende un poco que estaba sucediendo dentro de su cuerpo y empieza a investigar porqué la biodiversidad de su microbiota había disminuido y así se da cuenta el alto porcentaje de personas que sufren de problemas gastrointestinales. Es por eso que decide usar el arte como medio físico para hablar de un tema importante que ha empeorado a raíz del virus que paró el mundo. “Intestinal Affair” muestra el intestino en diferentes etapas y sus micro-habitantes intentando regenéralo. A través de esculturas orgánicas y color, la artista muestra la relación simbiótica que existe dentro del intestino con las bacterias, como se envuelve y tiene esta relación íntima con los órganos, en este caso regenerando el intestino enfermo.

Indigestión informativa

«Turbulencias» es la nueva exposición de Daniel Canogar para la Galería Max Estrella.En ella explora nuestra capacidad para ordenar, procesar y dar sentido al flujo de noticias que recibimos diariamente. Para el artista madrileño, seguir las noticias se ha convertido en un ejercicio traumático que nos genera rabia, impotencia, y finalmente insensibilización. Simultáneamente, tenemos una relación adictiva con los medios y las redes sociales que nos enganchan con ciclos interminables de noticias que frustran nuestra necesidad de reposo y asimilación de los eventos del día.

Esta exposición afronta la indigestión informativa contemporánea procesando el torrente imparable de información con la ayuda del arte y del algoritmo. Incluye además las series Pixelweaver y Wayward, que se manifiestan no solo como proyectos generativos presentados sobre pantallas, sino también como capturas congeladas. A través de papeles pintados de gran escala, así como de fotografías digitales, se intenta detener el ritmo imparable de tiempo, para así poder procesar la vorágine de acontecimientos sociales, políticos y medioambientales que tanto nos han sacudido recientemente. La muestra retrata los tiempos alborotados que estamos viviendo a través de referencias a la historia del arte, la tradición textil y la herramienta digital que tanto ha cambiado nuestra percepción de la realidad.