Salvador Alemany buscará mayor accesibilidad y mecenazgo para el Liceo

Su trabajo se centrará, sobre todo, en continuar para que sea definitivamente el teatro de todos. «No es incompatible la excelencia con la accesibilidad», aseguró ayer.

Nacido en el barrio del Raval en 1944, Salvador Alemany vio de primera mano como en aquellos sus primero años el Liceo era una especie de fantasma, una institución que por muy cerca que estuviera, parecía alejada de la mayoría de barceloneses por miles de kilómetros. Ahora, convertido en el nuevo presidente del patronato de la Fundación del Gran Teatro del Liceo, su trabajo se centrará, sobre todo, en continuar para que sea definitivamente el teatro de todos. «No es incompatible la excelencia con la accesibilidad», aseguró ayer.

El presidente de Abertis fue nombrado ayer tras la reunión del patronato en la Generalitat, que incluye a las diferentes administraciones, la Sociedad del Liceo y el Consejo de Mecenazgo. Como presidente de honor, Carles Puigdemont fue el encargado de hacer el anuncio.

Alemany sustituye así a Joaquim Molins, presidente los tres últimos años y que el lunes se vio forzado a dimitir por cuestiones de salud. Su sustituto no dudó en alabar la labor de Molins y mantener que todavía es más necesario que nunca «combinar la colaboración público privada» para conseguir la estabilidad del teatro.

Su labor como presidente del Consejo de Mecenazgo le ha posibilitado conocer de la mano las posibilidades todavía por recorrer en este terreno y el imperativo de explotarlas al máximo. Alemany aseguró que gracias al nuevo tratamiento fiscal al coliseo lírico ahora se tiene una mejor «palanca para aproximarnos a sectores de empresa significativos». A su vez, insistió en que el mecenazgo se ha de abrir a nuevas fronteras y empezar a atraer a las principales capitales europeas para consolidar al Liceo como «el teatro de ópera más importante del sur de Europa» y así competir en la «Champions» de la ópera mundial.

El nuevo presidente del patronato reconoció que no es un gran melómano, pero que las necesidades de su cargo no lo necesitan. Lo que sí ofrece son «gran capacidad de gestión, el vínculo social y la capacidad de relación con los diferentes sectores que puedan aproximarse al Liceo». Siempre con una visión optimista de lo que el futuro puede ofrecer, Alemany asegura que dedicará el 100 por cien de su atención al cargo. «Creo que podremos superar esta etapa con esfuerzo y con un equipo magnífico para afrontar un futuro de excelencia» dijo.