Caso Campeón
El juez ve estafa en el doble sueldo de Cuervo en el ICS y el Sant Pau
El caso del Hospital Sant Pau de Barcelona sigue adelante y ayer apareció un nuevo auto del juez que se encarga de la investigación. El magistrado concluyó que el doble sueldo cobrado por el ex delegado de la Generalitat José Cuervo cuando fichó como directivo del centro sanitario supone un fraude al Institut Català de la Salut (ICS), que podría constituir un delito de estafa agravada.
Con este auto, el juez dio por concluida la investigación que abrió sobre los dobles pagos a Cuervo por dos contratos sucesivos que firmó en 2011 con la Fundación Privada y de Gestión del hospital, por lo que lo mantiene imputado a él y a los que eran gerentes del esas entidades, Jordi Varela y Jordi Bachs.
El juez remite ahora la causa a la Fiscalía y al resto de partes personadas para que, en su caso, presenten sus escritos de acusación contra los tres imputados por los dobles pagos a Cuervo, paso previo a la apertura de juicio oral contra ellos por un delito de estafa, agravada al tratarse de una contratación pública.
Según mantiene el magistrado en su auto, de lo investigado hasta ahora se desprende que el ICS «resultó defraudado» con la doble remuneración percibida por Cuervo, en la cantidad de 47.072 euros, por lo que ofrece a esa entidad pública la posibilidad de ejercer acciones como perjudicada en la causa.
El magistrado abrió esta investigación para determinar la legalidad de los sueldos que Cuervo, que era un cargo de la Generalitat en la época del tripartito y ex concejal del Ayuntamiento de Barcelona, percibió como funcionario del ICS y, simultáneamente, por dos contratos firmados con las fundaciones del Sant Pau para desarrollar el campus universitario y asesorar en la construcción de nuevos edificios destinados a la investigación científica.
Tras tomar declaraciones a imputados y testigos, el juez concluye en su auto que «Cuervo cobraba simultáneamente del Sant Pau y del ICS, sin que este organismo lo supiera». En su declaración ante el juez, los gerentes imputados alegaron que esos contratos suscritos con Cuervo pretendían proporcionarle un complemento salarial, porque la retribución que el ICS pagaba a Cuervo era insuficiente en relación con el trabajo que éste debía desempeñar en el hospital. «Sucede, sin embargo, que esta decisión nunca fue comunicada al Institut Català de la Salut, el cual siguió pagando ignorando que existía un contrato paralelo», dice el auto.