Cataluña
El Ejército pide la apertura de un nuevo Museo Militar
El teniente general Álvarez–Espejo propone «ofrecer la historia de manera objetiva»
Pese a que su carrera en Cataluña se acaba, porque próximamente pasará a la reserva, el inspector general del Ejército, Ricardo Álvarez–-Espejo, afirmó ayer, en Barcelona, que confía en que la ciudad pueda volver a tener en un futuro otro museo militar, enfocado en «ofrecer la historia de manera objetiva».
Pese a que su carrera en Cataluña se acaba, porque próximamente pasará a la reserva, el inspector general del Ejército, Ricardo Álvarez–-Espejo, afirmó ayer, en Barcelona, que confía en que la ciudad pueda volver a tener en un futuro otro museo militar, enfocado en «ofrecer la historia de manera objetiva», ya que consideró que existe interés ciudadano para que se materialice esta iniciativa.
Tras la polémica clausura del Museo Militar de Montjuïc, el Ayuntamiento rechazó la construcción de un proyecto parecido. Precisamente fue el propio Álvarez–Espejo quien anunció, en 2015, la propuesta para volver abrir otro recinto similar. El PP se opuso a la negativa del Consistorio, en ese momento dirigido por Xavier Trias. Con la llegada de Ada Colau, evidentemente nada cambió.
Álvarez–Espejo, que sigue siendo el representante institucional de las Fuerzas Armadas en Cataluña, Aragón, La Rioja y Navarra, aseguró, en una entrevista en el programa Converses de Cope, que las exposiciones temporales que se organizan en la sede del gobierno militar podrían ser el embrión de un futuro museo.
A su juicio, este museo ofrecería una visión histórica objetiva «y no ideológica» sobre la historia y el papel del Ejército en Cataluña a través de múltiples aspectos, como su impacto en la industria, en la economía, en la ciencia, en la investigación o en el desarrollo de la ingeniería. ¿Entonces cual es el problema? Pues la oposición de todos los grupos municipales, exceptuando al PP y a Ciudadnos. Además, existe ahora mismo la figura de la actual alcaldesa, Ada Colau, que no es muy favorable o partidaria de todos los asuntos militares.
El inspector general consideró que un futuro museo militar tendría una demanda relevante, ya que cifra en más de 15.000 personas las que han pasado por las exposiciones temporales que se vienen celebrando en el gobierno militar de Barcelona.
Por otra parte, Álvarez–Espejo, destacó, antes de pasar ya a la reserva, destacó «la cordialidad y la normalidad» que ha encontrado a lo largo de los últimos tres años en los que ha estado destinado en Barcelona. Se mostró «satisfecho» del progresivo acercamiento a la sociedad y trabajo de transparencia realizado por las Fuerzas Armadas, y mostró su confianza en una mayor presencia del Ejército.
La exclusión de Colau aún escuece
Es conocido que le relación entre el Ejército y las administraciones catalanas no son buenas. El último desencuentro ocurrió recientemnete. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, consiguió que el Ejército, la Policía Nacional, la Guardia Civil, los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana no estuvieran presentes en el Salón de la Infancia. Pese a que las actividades propuestas por los uniformados se encuentran entre las preferidas por los visitantes, el consorcio organizador, Fira Barcelona, Colau tomó esta decisión escudándose en la idea de «reenfocar el salón hacia actividades más lúdicas y de ocio». El Ejército, por su parte, criticó su «exclusión» del Salón de la Infancia.