El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, pidió «más transporte ferroviario» de mercancías de cara a «mejorar la distribución de cuotas» entre este, que supone solo un 3 por ciento en España frente al 17 por ciento de la media europea, y el transporte por carretera, que aglutina el 85 por ciento en el país.

«Debemos complementar el ferrocarril y la carretera para reducir tiempos y gastos y que mejore la competitividad de las empresas», defendió durante la clausura de la jornada «Intermodalidad: nuevos conceptos, nuevos retos, nuevas oportunidades» celebrada en Salamanca.

«España está muy por debajo de la media europea, a pesar de que tiene una importante red ferroviaria, y más cuando la red convencional queda libre de tráfico de viajeros con la nueva red de AVE», señaló el consejero, para quien esto supone un factor de «desarrollo del territorio» como forma de «luchar contra la despoblación de nuestro medio rural».

Por ello, Suárez-Quiñones pidió la «complementariedad» entre el transporte de mercancías por carretera y ferroviario, puesto que ese ajuste «no es ir en contra de la carretera», sino un complemento porque las líneas de tren son cerradas para un determinado trayecto y el transporte por carretera «va a seguir siendo muy necesario».

De esta manera, dijo, se daría «la oportunidad a las empresas para que elijan aquello que sea más adecuado para su modelo de negocio», porque permite a determinadas compañías «que se instalen aquí y tengan una oportunidad de transporte por tren» sin que sea un menoscabo ni un «detrimento para que otros tipos de empresas puedan utilizar el transporte por carretera».

En este sentido, el responsable de Fomento reivindicó la situación de la capital y la provincia salmantina como «punto neurálgico de la red transfronteriza europea de transportes». Por ello, consideró que la «situación privilegiada de Castilla y León y Salamanca en el centro peninsular», dentro del Corredor Atlántico en el que viven 56 millones de personas y que mueve 1,6 millones del PIB de Europa, y 156 millones de toneladas de mercancías al año, hace que la provincia tenga que «convertirse en un líder de intermodalidad en la red europea».

Todo ello a través de la plataforma logística Zaldesa, que lidera el Ayuntamiento de la capital salmantina, y donde la Junta «ha estado a su lado con una subvención que va a permitir desarrollar esa plataforma para el tráfico con los puertos portugueses de Leixoes, Aveiro y Figueira da Foz», convirtiendo a Salamanca en un «nudo muy importante» de la relación entre Portugal, España y Europa.

Por su parte, el alcalde de la capital, Carlos García Carbayo, destacó el «gran potencial» de Salamanca para convertirse en «foco de atracción de empresas en el ámbito de logística y transporte» como «nodo de la red global del Corredor», además de estar a «muy pocos kilómetros de la capital del país y ser parte de la Ruta de la Plata».

Ahora, y dado que la provincia salmantina tiene un «buen transporte por carretera», es tiempo de «mejorar el transporte de mercancías por ferrocarril» donde criticó la paralización del Gobierno de la electrificación de la línea hasta Portugal.