«Más vale tarde que nunca», reza el sabio refranero popular, y que puede valer para el nuevo edificio que albergará al Ayuntamiento de la localidad palentina de Guardo, además de salas de exposiciones, salones de actos y de plenos, un auditorio para la oferta cultural con capacidad para 400 personas e incluso las dependencias de la Policía Local.

Un viejo y necesario proyecto que se iniciaba en 2007, que se paralizaba en 2013 al faltar los Fondos Miner conque se estaban financiando debido a la crisis económica, pero que un lustro más tarde ve la luz para orgullo y satisfacción de los vecinos de este municipio en otros tiempos minero de la Montaña palentina, que cuenta con alrededor de siete mil habitantes.

El edificio ha costado 6,5 millones de euros, de los cuales la Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha aportado 1,5 .

«Estas nuevas instalaciones están diseñadas y pensadas para dar un mayor y mejor servicio a los vecinos de Guardo», decía durante la inauguración el consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones, para quien este nuevo edificio pone de manifiesto el compromiso de las administraciones con la calidad de vida y bienestar de la comarca.

El alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, agradecía a la Junta su compromiso para hacer realidad este proyecto que «ha devuelto el uso de la plaza a los vecinos, secuestrada desde 2011». Los trabajos también han servido para mejorar el entorno de la plaza, con un nuevo mobiliario urbano e iluminación, y se ha construido un nuevo aparcamiento subterráneo bajo el edificio.

Al acto asistían el consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo; la presidenta de la Diputación de Palencia, Ángeles Armisén; y el líder del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, para quien este nuevo edificio, «es un símbolo de la fortaleza del mundo rural». El también alcalde de Salamanca aseguraba que el futuro de los pueblos pasa por apostar por el empleo y la creación de oportunidades, pero también, y sobre todo por, por crear infraestructuras como ésta y favorecer el acceso a la cultura y al ocio a sus habitantes.