Todo en el puente

Sigo con el optimismo de ayer. Trabajé. La radio, al contrario que la televisión, no sabe de festivos ni de feriados. Como, afortunadamente, Onda Cero en Sevilla tiene su sede en la mismísima calle San Fernando, acudir al trabajo es encontrarte con la ciudad. Estudiantes, turistas, empresarios, periodistas... Unos acuden a sus clases, otros a conferencias, reuniones en el Alfonso XIII. En pocas palabras, la vida que transcurre ante tu mirada. Por eso, uno de los pagos mensuales que siempre me parecerá barato es el abono para aparcar en el Alfonso. Estoy seguro de que debe ser bueno para la salud. Porque irte a un polígono o, como en Madrid, a una sede que está más cerca de Burgos que de la capital del Reino te termina creando un estado de ansiedad más grande que el que sufre la mismísima Rosa Benito. Por cierto, lo de esta buena mujer es de estudio. Estar siempre a la sombra de la más grande, de Rocío, para ir degenerando y estar dos escalones por debajo de Belén Esteban es para pillar una baja de cinco años por depresión. Me hallo perdido entre los cientos de turistas que deambulan, tras los guías con banderín de enganche que los conducen camino de los grandes monumentos, porque lo que quiero contar en «Herrera en la Onda» son dos noticias madrileñas. La primera, el más grande manejando las pelotas, me refiero naturalmente a los balones de fútbol, ya saben, Cristiano Ronaldo, después de dos grandes premios deportivos, remata la semana acudiendo al Museo de Cera madrileño, donde es oficialmente expuesta su figura. Sé que inmediatamente alguna lengua insidiosa dirá que, posiblemente, hayan retocado la de Di Stéfano, ya retirada, para que todo quede en casa. La mayor calumnia que se ha levantado contra este centro, que, por cierto, es uno de los museos más visitados en una ciudad que tiene más y mejores museos del mundo es que aprovecharon la retirada de la figura de Franco para realizar la de Santiago Carrillo. Supongo que sería por lo de tener una talla parecida. Eso no va a suceder con Cristiano, su talla es muy difícil de igualar.

La otra noticia de la Villa y Corte la titularía «Milagro en Chueca». Seguramente conocen que ese barrio madrileño se ha convertido en zona gay, lo que lo hace tremendamente atractivo, también a nivel internacional. Se ha convertido en un referente. Sus bares, sus tiendas, sus restaurantes son lo más. Naturalmente, en esos espacios las publicaciones de ese sector, con Shangay a la cabeza, las encuentras por todas partes. En los últimos días, lo que te será más visible son los carteles que anuncian la presentación hoy del último libro de Pitita Ridruejo sobre las apariciones de la Virgen. Al contrario que muchos, no encuentro nada raro en semejante situación. Pitita es un icono gay. No vamos a engañarnos, su look tiene mucho de Drag Queen. Lo único que le pediría a Pitita es que la Virgen no se le aparezca, como sería normal por otra parte, ni en la Cope ni en 13 TV y que lo haga en Onda Cero y en LA RAZÓN, que se lo han ganado a pulso. Para rematar, para cuándo el gran homenaje de las grandes marcas de lacas a la fastuosa Pitita, que ha sido durante muchos años, desinterasadamente, la mejor imagen de este producto. Con su melena laqueada no han podido ni los más terribles huracanes.