Accidente

El mayor carguero de la flota logística militar rusa se hunde frente a la costa española tras una explosión

Catorce tripulantes han sido rescatados y están en Cartagena, pero otros dos permanecen desaparecidos. El Ursa Major es sospechoso de viajar en una misión secreta hacia Siria

El carguero ruso Ursa Mayor
El carguero ruso Ursa MayorLa Razón

Nuevo accidente de un buque de la llamada flota fantasma de la marina mercante de Rusia. El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ha informado hoy de que dos personas se encuentran desaparecidas tras el hundimiento la noche del lunes del buque mercante Ursa Major en aguas internacionales del mar Mediterráneo, junto a las costas de España y Argelia. Los otros 14 tripulantes del Ursa Major fueron rescatados y trasladados al puerto español de Cartagena, se afirma en un comunicado difundido por el Centro de Gestión de Crisis.

El Usra Major, construido en 2009, sufrió una explosión en la sala de máquinas por motivos desconocidos. Esta barco desplaza 12.000 toneladas y es el mayor carguero de la flota logística militar rusa. El buque formaba parte de una misión secreta del presidente de Rusia, Vladímir Putin, según el diairio británico The Sun. El objetivo del viaje de la embarcación no es clara, pero fuentes de inteligencia ucranianas y españolas sugieren que se dirigía a Siria para retirar equipo de ese país tras la reciente caída del dictador sirio Bashar al-Assad, añade el rotativo.

El hundimiento del mercante, que según medios rusos transportaba dos grúas portuarias y partes para la construcción de rompehielos, se produjo tras una explosión en la sala de máquinas, según las autoridades rusas.

El Ursa Major, de 142 metros de eslora y 23 de manga, era explotado por una filial de la compañía Oboronlogistika, designada por el Gobierno ruso como único prestador de servicios del Ministerio de Defensa de Rusia para el transporte de cargas a Crimea, el Ártico y el extremo oriente del país. Según la web de seguimiento de transporte marítimo LSEG, el barco partió de la ciudad rusa de San Petersburgo el pasado 11 de diciembre y la última vez que se le detectó fue a las 22.04 GMT (23.04 en la España peninsular) del lunes entre Argelia y España.

Cómo fue el salvamento desde España

Según explicaron desde Salvamento, a las 12.15 horas del domingo se recibió una alerta en la radio baliza de localización de siniestros desde este buque que se encontraba en navegación en aguas internacionales a 62 millas náuticas entre la costa de Orán y Águilas, en zona de rescate perteneciente a España. Salvamento Marítimo indicó, siguiendo el protocolo internacional, al mercante más próximo, Oslo Carrier III, que acudiera donde se encontraba el Ursa Major para comprobar que había sucedido. Este barco confirmó que el buque ruso había sufrido una explosión en la zona de máquinas. Así, Salvamento Marítimo puso en marcha el operativo de rescate.

Se movilizó una Salvamar Draco de Salvamento Marítimo y el buque Clara Campoamor para proceder al rescate de la tripulación. El buque de salvamento fue escoltado por la patrullera Serviola de la Armada Española.

También se desplazó a la zona un barco de la Armada rusa que solicitó hacerse cargo de la operación de salvamento, amparándose en el convenio UNCLOS (Convención de las Naciones sobre el Derecho del Mar), al que se transfirió el control de los trabajos de rescate. Este acuerdo recoge que un barco de su bandera, sino está en aguas internacionales jurisdiccionales, se puede hacer cargo del salvamento de otro barco de su país.

Cómo es el carguero hundido

El carguero ruso Ursa Major ha captado la atención internacional debido a su implicación en diversas operaciones marítimas en un contexto global cada vez más tenso. Este buque, cuyo nombre significa Osa Mayor, ha sido objeto de vigilancia por parte de múltiples organismos navales debido a su posible participación en actividades estratégicas o logísticas relacionadas con las políticas marítimas de Rusia.

El Ursa Major, un carguero de gran capacidad, forma parte de una flota mercante que a menudo transporta bienes esenciales como recursos energéticos, materiales industriales y suministros para regiones remotas o en conflicto. En algunos casos, estas naves han sido utilizadas en operaciones militares encubiertas o para sortear sanciones internacionales, lo que subraya la relevancia geopolítica de buques como este.

En el marco de la actual guerra en Ucrania, la actividad de barcos como el Ursa Major es especialmente monitoreada por servicios de inteligencia occidentales, que buscan rastrear el flujo de materiales hacia las fuerzas rusas. Al mismo tiempo, este tipo de cargueros desempeñan un papel crucial en el suministro de productos básicos hacia mercados internacionales que dependen de las exportaciones rusas.