Guerra de Ucrania
Rusia embiste Odesa por la voladura del puente de Kerch
El Kremlin asegura haber atacado el astillero ucraniano en el que se fabrican los drones marítimos
El puerto más grande de Ucrania, Odesa, se convirtió en el objetivo del ataque con misiles y drones más reciente de Rusia en la noche después de que Rusia se retirara del Acuerdo de Granos. El ataque fue calificado por el Kremlin como una «represalia por el puente de Crimea». Seis misiles «Kalibr» y 36 drones kamikaze atacaron desde el sur, en oleadas, también apuntando a la ciudad de Mykolaiv y varias otras regiones en el este y el centro, informaron las fuerzas aéreas de Ucrania. Todos los misiles y 31 drones fueron interceptados, con fragmentos caídos provocando daños a la propiedad en tierra. «Los escombros de los misiles derribados y la onda expansiva del impacto dañaron las instalaciones de la infraestructura portuaria y varias viviendas», informaron las autoridades.
El Ministerio de Defensa ruso informó que se alcanzaron todos los objetivos previstos, incluidas las «instalaciones de almacenamiento de combustible para las Fuerzas Armadas de Ucrania en las regiones de Odesa y Mykolaiv» y «objetos donde se preparaban actos terroristas contra la Federación Rusa utilizando barcos no tripulados». El ataque se llevó a cabo «en represalia por el puente de Crimea», añadieron.
Después de que las sirenas y las fuertes explosiones despertaran a los vecinos alrededor de las 2 de la mañana, muchos siguieron la regla de las «dos paredes», refugiándose en los pasillos u otras habitaciones internas, que no tenían ventanas. Un fragmento de un misil derribado dañó una casa privada y cayó en la cama de un hombre de Odesa de 74 años. Su esposa, Valentyna, dijo a la policía que se despertó en medio de la noche debido a las explosiones y que no entendió de inmediato por qué su casa estaba llena de polvo.
«Me levanté de un salto, y todo estaba como en una niebla. No entendía de dónde salieron los escombros», dijo. Valentyna inmediatamente corrió hacia su esposo en la habitación de al lado. «Traté de sacar el fragmento de un misil de sobre mi marido pero no pude porque gritaba que le dolía». Según su esposa, el hombre tiene costillas rotas y está siendo tratado en un hospital. En total, cuatro personas murieron y 16 resultaron heridas ya que Rusia también usó aviación y artillería para atacar áreas civiles en 10 de las 25 regiones de Ucrania.
Las Fuerzas Aéreas revelaron que los misiles probablemente fueron lanzados desde la fragata rusa «Almirante Essen», mientras que los «Shahed» lo fueron desde el campo de entrenamiento de Chauda en Crimea. Varias piezas producidas en países occidentales y asiáticos fueron encontradas en los drones que atacaron Mykolaiv, reveló el jefe de la Oficina Presidencial de Ucrania, Andriy Yermak. «Rusia ha estado comprando productos tecnológicos extranjeros durante muchos años, pero ahora, cuando se están convirtiendo en instrumentos para matar personas, terrorismo y genocidio, esto no puede continuar», subrayó. Afirmó que la presencia de los detalles en drones recién producidos significaba que los controles existentes sobre las exportaciones tecnológicas a Rusia no son suficientes.
«Se necesitan nuevas restricciones, así como una implementación y un monitoreo más efectivos», dijo, señalando que el precio de la inacción son «las vidas humanas que se pierden todos los días». Ucrania, subrayó, está ofreciendo «pasos concretos» para resolver el problema y, aunque parte de ellos se incluyeron en el undécimo paquete de sanciones de la UE, se necesita hacer más, incluso por parte de países fuera de Occidente.
Mientras tanto, el tráfico se ha renovado parcialmente a través del puente de Crimea, a pesar de los extensos daños que sufrió el lunes por la noche. Las autoridades rusas publicaron un video que muestra los autos que pasan en un carril disponible. Su Ministerio de Defensa también informó de un ataque masivo de drones por la noche, asegurando que 17 aparatos ucranianos fueron interceptados por las defensas aéreas y 11 fueron desactivados por otros medios. El Ejército de Ucrania informó de una creciente presión de las tropas rusas en la región de Járkiv, en el este, donde se concentran alrededor de 100.000 soldados y unos 900 tanques. La situación «es complicada pero sigue bajo control». Según Ganna Maliar, viceministra de Defensa, Rusia busca desviar a las tropas ucranianas de la zona cercana a Bajmut y del sur.
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