Guerra en Ucrania

Putin se muestra a favor del alto el fuego, pero insiste en que debe abordar "las raíces" del conflicto

El presidente ruso ha asegurado que hay "asuntos que tenemos que discutir", antes de dar luz verde a la misma

Russian President Vladimir Putin attends a meeting with Belarusian President Alexander Lukashenko at the Grand Kremlin Palace in Moscow, Russia, Thursday, March 13, 2025. (Maxim Shemetov/Pool Photo via AP)
Russia BelarusASSOCIATED PRESSAgencia AP

Rusia ha dicho no. La negativa a suscribir la tregua acordada por Estados Unidos y Ucrania en las conversaciones mantenidas este pasado martes en la ciudad de Yeda, Arabia Saudita, fue comunicada, primero por el consejero del Kremlin en asuntos internacionales, Yuri Ushakov, y más tarde por el propio presidente ruso, Vladímir Putin. Uno de los hombres fuertes de Moscú informaba ayer que su país había decidido rechazar la tregua propuesta por el presidente norteamericano, Donald Trump, que fue aceptada por el gobierno de Kiev esta misma semana tras un encuentro de varias horas. Ushakov, se adelantaba a la reunión con Steve Witkoff, el representante norteamericano llegado a Moscú para explicar los detalles del acuerdo, declarando que el Kremlin no quiere "una tregua provisional, sino un "arreglo duradero", alegando que los hipotéticos 30 días de paz sólo servirían para darle “un respiro” al ejército ucraniano. Según el asesor presidencial, los negociadores rusos van a insistir en defender esta postura. "Nuestro objetivo es un arreglo pacífico duradero que tenga en cuenta los intereses legítimos de nuestro país", decía el consejero haciendo referencia a las exigencias de Moscú para poner fin a la campaña militar en el país vecino. Según estas demandas, el gobierno de Kiev debería renunciar oficialmente a entrar en la OTAN y retirar a su ejército de las cuatro regiones ucranianas reclamadas por Moscú. Poco después le tocaría el turno al presidente ruso, que habló ante la prensa después de su encuentro con su homólogo bielorruso, Aleksander Lukashenko. Putin volvió a decir que no, un poco más endulzado, pero no menos contundente. "Estamos de acuerdo con las propuestas de cese de hostilidades, pero creemos que este cese debe conducir a una paz a largo plazo y erradicar las causas de la crisis inicial", explicaba el premier ruso, poniendo en duda un posible seguimiento de esos hipotéticos 30 días sin disparos en el frente. "¿Cómo se usarán estos 30 días? ¿Para que continúe esta movilización forzosa en Ucrania? ¿Para que se puedan suministrar armas allí? ¿Para que los movilizados se entrenen? ¿O no se hará ninguna de estas cosas? Entonces surge la pregunta. ¿Cómo nos garantizarán que no ocurrirá ninguna de estas cosas?", apostillaba el presidente. Asimismo, se preguntaba en voz alta quién daría las órdenes para suspender los ataques y garantizar la paz, justificando el hecho de que en una línea de frente de 2.000 kilómetros resultaría casi imposible detectar posibles incumplimientos de ese alto el fuego.

A pesar de su desconfianza sostuvo que la idea de poner fin al conflicto ucraniano de forma pacífica es correcta. "La idea en sí es correcta y sin duda la apoyamos, pero hay cuestiones que deben debatirse. Tenemos que hablar con nuestros colegas y socios estadounidenses, y tal vez llamar al presidente Trump para abordarlo con él. Pero apoyamos la idea de poner fin a este conflicto de forma pacífica", apostilló Putin dándole las gracias al presidente norteamericano, Donald Trump. Poco antes de su intervención ante la prensa le tocó hablar al presidente de Bielorrusia, Alexánder Lukashenko. La sintonía entre los dos líderes es evidente y se ha reforzado con la ayuda prestada desde Minsk para la campaña militar rusa en Ucrania. El bielorruso no dejó escapar la oportunidad de hablar y mostró sus reticencias sobre la propuesta norteamericana de paz. "Puedo afirmar con seguridad que los estadounidenses no tienen ningún plan para el conflicto ucraniano. Absolutamente no. Lo que están haciendo es sondear el terreno: ¿qué es lo que quiere esta gente y qué quiere la otra gente? Hoy hablaremos de ello. Vladímir Vladímirovich Putin me informará sobre lo acordado en Arabia Saudita, entre otras cosas", dijo Lukashenko. Además, el presidente bielorruso declaró que Washington no es capaz de presionar a Rusia para obligarle a firmar un acuerdo que no este país no acepte, a diferencia de Ucrania. "Ya se nos han impuesto tantas sanciones que no hay otro sitio donde imponerlas. Presionaron a Ucrania, y ellos no tienen otra opción, aceptando los 30 días. ¿Y los rusos? ¿Qué son esos 30 días? La economía y el complejo militar industrial seguirán funcionando", confesaba el mandatario que no consideró que los estadounidenses pudiesen tenderle una trampa a su amigo Putin. Los cálculos rusos sostienen que el país controla actualmente el 75% de las regiones de Donetsk, Zaporiyia y Jerson y más del 99% de la región de Lugansk, esto supone casi el 20% del territorio total ucraniano. Nadie sabe si esta negativa a la tregua podrá acarrearle al país nuevas sanciones dictadas desde el otro lado del Atlántico.